martes, 15 de noviembre de 2016

noviembre 15, 2016
Mtro. Omar Ocampo, Fundador del Observatorio de la Facultad de Derecho de la UADY

Una vieja regla de la campaña política reza “promete aunque no cumplas”. Carlos Macedonio cuando se le dijo que iba a ser impuesto generó un plan de trabajo al vapor ya que se sentía ungido y de un día para otro apareció con un documentito sin sentido para cumplir con un “plan de trabajo”. 

El documento que presentó prometió una serie de medidas irrealizables e imposibles el ejemplo más visible de este bodrio es el objetivo que tituló como “Acrecentar la calidad de los programas de posgrado para obtener el reconocimiento de PNPC-SEP-CONACYT logrando la internacionalización”.


Interpretando su mala redacción podemos ver que intenta tener un posgrado (quien sabe si de maestría o de doctorado) en su institución que tenga el “nivel de internacional”. Interesante es el considerar que para lograr esto necesita pasar por tres instancias previas, así como el poseer personal académico que no tiene ni podrá tener ya que no hay personal con las características para alcanzar ese nivel en todo el estado. Es más. No hay en todo el país un Doctorado con estas características. Y lo prometió Macedonio.

El CONACYT pide que haya por lo menos 7 doctores miembros del Sistema Nacional de Investigadores con reconocimiento internacional y con Nivel III. Los que tiene actualmente no tienen ni tendrán los arrestos suficientes para ser reconocidos con tal calidad ya que como se denunció previamente uno solo está para cobrar doble sueldo.

También para lograrlo se pide que haya una evaluación del desarrollo del programa, que no lleva menos de 8 años. Lo que significa que no lo logrará pues le quedan menos de dos años y medio de administración. Y menos aún lo logrará con la renuncia a la coordinación de posgrado de la Mtra. Socorro Guillermo la única que poseía en estos momentos algún dejo de credibilidad académica.

La escuela de derecho de la Uady ha sido desarticulada de tal forma que no posee ni siquiera al personal académico siquiera cercano para lograr que haya un posgrado en derecho a nivel doctoral. Tan es así, que Macedonio tuvo que subrogar a la Universidad de Tlaxcala la impartición de un doctorado exprés.

En este caso, pagará el haber preferido los doctorados exprés y sin calidad ya que al ser evaluado se darían cuenta los evaluadores Conacyt de sus titulaciones exprés y sin nivel. Comenzando con el propio director que fue graduado ex profeso para lograr ser candidato a la dirección.

Como consecuencia es imposible que se cumpla otro objetivo “Impulsar la vinculación del programa de posgrado con los sectores de la sociedad”. Se trata de una frase vaga, de relleno, y que menos aun pudiera cumplir con la única teoría obsoleta que promueve su tridimensionalismo… El posgrado en derecho no tiene vinculación alguna al ser un posgrado creado hace más de 15 años, obsoleto y caduco.

En resumidas cuentas, Macedonio mintió por ofrecer algo imposible.

¡Macedonio, muestra los avances de tu Doctorado internacional!

¡Macedonio muestra tu maestría con nivel de internacional!

Usted juzgue estimado lector.