lunes, 19 de agosto de 2013

agosto 19, 2013
ESTADOS UNIDOS, 19 de agosto.- Los trenes de alta velocidad de toda Europa están en el punto de mira de Al Qaeda. La organización terrorista planea atentados contra objetivos ferroviarios este verano, concretamente durante el mes de agosto, que no se realizarían con bomba, sino saboteando vías e instalaciones eléctricas.

Mapa de los trenes de alta velocidad en Europa (imagen: HubPages)

El uso de explosivos, en esta ocasión se reservaría para detonaciones en el interior de túneles, aunque la organización deja vía a las células terroristas para utilizarlos puntualmente dentro de los trenes si lo consideran más conveniente.

Toda esta información sale de una conversación telefónica que han mantenido "dos altos cargos" de Al Qaeda y que ha sido interceptada por la agencia de espionaje estadounidense NSA (Agencia Nacional de Seguridad). El contenido de la conversación ha sido posteriormente filtrado al diario alemán Bild Zeitung, que en su edición de hoy publica los datos y confirma que las autoridades alemanas ya han reforzado la seguridad en torno a sus trenes de alta velocidad ICE, aumentando la vigilancia en estaciones y rutas desde hace varias semanas. El Ministerio de Interior alemán ha confirmado esta mañana que estaba al tanto de estas informaciones en el marco de las tareas de cooperación entre sus servicios secretos y los estadounidenses.

Cooperación con los servicios secretos

Esta conveniente filtración viene a reforzar las explicaciones dadas por la NSA a Alemania, después de conocerse gracias a los papeles de Snowden que millones de conversaciones telefónicas y correos electrónicos privados son espiados indiscriminadamente y de forma sistemática en territorio alemán. Precisamente este lunes, el ministro de Cancillería Roland Pofalla, comparece de nuevo ante la comisión parlamentaria de investigación, interesada en conocer al detalle el nivel de cooperación con los servicios secretos estadounidenses.

Durante su visita a Berlín, la pasada primavera, el presidente Obama justificó el espionaje asegurando que "ha servido para evitar atentados, no solamente en suelo norteamericano, sino también en suelo europeo", lo que esta información vendría a probar. La canciller Merkel, por su parte, sigue instalada en la defensa de que "siempre que la libertad sea sacrificada en aras de la seguridad, las medidas deben responder al principio de la proporcionalidad".

A principios de verano, la Administración estadounidense ya advirtió sobre "la posibilidad de que los terroristas ataquen los sistemas de transporte público y otras infraestructuras turísticas", dijo el Departamento de Estado, y todo parece indicar que cuando fue emitido este comunicado, la información sobre el plan de ataques ferroviarios ya estaba en su poder. (Rosalía Sánchez para El Mundo)

0 comentarios:

Publicar un comentario