miércoles, 1 de junio de 2016

junio 01, 2016
José Martín Ramírez Pech

Sí tienen derecho a manifestarse, si no están de acuerdo con la reforma educativa, pero no en días y horarios de trabajo, porque se les paga para impartir clases y educar a nuestros hijos, no para que anden perjudicando y desquiciando a terceros.

¿Qué pasaría si cualquier trabajador de la iniciativa privada o incluso de otras dependencias federales, estatales o municipales, falta tres días injustificadamente?, pues, sería cesado de su empleo.

En el año 2013 se promulgó en México una iniciativa de reforma educativa, con la que el Estado retoma la rectoría de la educación pública, y en respuesta, varios grupos de trabajadores del magisterio han estado llevando a cabo marchas, plantones, manifestaciones callejeras y bloqueos de carreteras, con la finalidad de presionar al Congreso de la Unión para que se revierta la nueva ley en materia de educación; los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, (CNTE), han manifestado su inconformidad a la nueva reforma con su resistencia a la evaluación y se oponen a la presentación de exámenes, también exigen la inmovilidad de los maestros, forma de reconocer que las plazas han sido ya privatizadas y que son propiedad del sindicato o de los maestros, y es evidente la lucha por el control y la venta de éstas; asimismo, exigen mantener los 60 días de aguinaldo, los 90 días de vacaciones por año, poder estar faltando y que de cualquier modo se les pague el día por no hacer nada, en fin, ¿Que ha obtenido el pueblo de México a cambio de todos los privilegios desmedidos que se les ha dado a esta clase privilegiada?

Los maestros de la CNTE están en su derecho de llevar a cabo protestas si no están de acuerdo con la reforma educativa; la pregunta es, si eso les da el derecho de bloquear vías públicas afectando a miles de automovilistas y a la economía de muchas familias, porque es claro que no se respetan los derechos de los ciudadanos cuando hay manifestaciones; pero quizá lo más imperdonable en todo esto es que por salir a las calles a estar haciendo sus manifestaciones y protestas, los maestros, dejan tiradas las aulas de clases en las que deberían estar enseñando a los niños y, pese a ello, exigen furiosos que se les siga pagando por todos los días que han dejado de presentarse en los salones de clases y, por si fuera poco, demandan mayores sueldos y mayores prestaciones como si los privilegios que ya tienen no fueran más que suficientes.

El panorama está cambiando, el titular de la SEP, Aurelio Nuño, admitió que los líderes de la CNTE que dirigen el paro, lo único que buscan es mantener los privilegios que se les han quitado con la implementación de la reforma educativa y anunció el despido de 3 mil 119 maestros que acumularon tres faltas consecutivas y sin justificación por no asistir a sus aulas en los estados de Guerrero, Michoacán y Oaxaca y llamó a los gobernadores de dichos estados para empezar el proceso de baja de los docentes, informándoles que dicho procedimiento tardará al menos 20 días hábiles.

Los ciudadanos exigimos que se aplique la ley y punto.