lunes, 16 de noviembre de 2015

noviembre 16, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 16 de noviembre.- Gerardo Rejón y Ruíz de Velasco, propietario junto con la diputada federal y ex gobernadora de Yucatán Ivonne Ortega Pacheco del restaurante Casona La Yucateca, es desde 2012 presidente nacional del sector empresarial del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, según informa el portal Letra Digital.

Sergio Castro y Gerardo Rejón.

Lo paradójico es que ese decidido apoyo político contrasta con la persecución que desde hace años realiza en contra de su socio Sergio Castro Pérez la autoridad fiscal federal por sospecha de realizar operaciones financieras irregulares para el ex gobernador de Oaxaca, el también priista Ulises Ruiz Ortiz.

De acuerdo con información publicada en medios informativos, Castro Pérez es perseguido por la Interpol y la PGR por presunta elusión fiscal por más de 5 mil millones de pesos; lavado de dinero por más de 100 mil millones de pesos, y diversas operaciones ilícitas por más de 30 mil millones de pesos por encargo de los ex gobernadores de Oaxaca, Ulises Ruiz; y de Puebla, Mario Marín Torres.

Rejón es parte de los despachos de fiscalistas del oaxaqueño Sergio Castro López a quien, a inicios del presente año, el SAT incluyó como persona física y a otra empresa vinculada a él, SOA Espectáculos AC, en la lista de contribuyentes incumplidos que no han pagado créditos exigibles y créditos firmes determinados por la Secretaría de Hacienda.

Castro López es buscado en 150 países por la Interpol para presentarlo ante la justicia mexicana por un cuantioso fraude al Estado mexicano y lavado de dinero proveniente de participaciones federales y de procedencia ilícita.

Sin embargo, su ex socio Rejón hoy ocupa una alta responsabilidad en el CEN del PRI aun frente a las acusaciones que pesan en su contra por la autoridad fiscal federal.

Una publicación de mayo del año en curso señala un posible vínculo entre Rejón y Guadalupe Martínez Silva, entonces candidata a la alcaldía de Jilotzingo, Estado de México:

"Cuando caminas por las comunidades de Santa Ana y San Miguel, las personas comentan que Rejón en los últimos años ha comprado un gran número de hectáreas en ambas comunidades a precios de risa ya que gracias a personas que trabajan en su casa se entera del momento en que los dueños son más vulnerables (por enfermedad, o aprietos económicos) es cuando el aparece en escena y realiza una oferta ridícula por dichas circunstancias la compra se realiza y el sigue hasta la fecha comprando terrenos en el municipio".

Según la publicación, Rejón también tiene intereses inmobiliarios en el municipio y piensa llevar a cabo un desarrollo conformado por edificios con departamentos de poco espacio maximizando los metros para que el mayor número de personas vivan en él y así sea más rentable.

"Se necesitan permisos para la explotación del suelo, traslados de dominio, uso de AGUA, drenaje y luz. Cuando Lupe sea presidenta las solicitudes de permiso no encontrarán mayor resistencia aunque esto perjudique el ecosistema y directamente a los vecinos de Santa Ana y San Miguel".

"Hoy se menciona que Rejón apoya a Guadalupe económicamente por medio de una fundación “Nuestras Realidades” de la que tampoco se encuentra mayor actividad en la red y que jamás ha hecho algo en beneficio de las comunidades de Jilotzingo, contrario a lo que dicen las bardas que están pintadas a lo largo del municipio de unos días a la fecha".

"De lo anterior deducimos que Rejón es el operador financiero de Guadalupe, el cual busca el beneficio de poder explotar los recursos naturales del municipio en un desarrollo inmobiliario a bajos costos y excesivas ganancias".(Con información de Letra Digital / ¡Sabías que!