jueves, 6 de febrero de 2014

febrero 06, 2014
¿De dónde salen las escenas cinematográficas de nuestras pesadillas? Investigadores han evaluado cientos de diarios de sueños y los resultados son sorprendentes: las pesadillas son más grotescas que los sueños normales y el miedo a caer está sobrevalorado.

Como un hermoso día en la playa. Pero ¿por qué no hay nadie más ahí? Luego salen del agua extraña gente sin ojos. Uno quiere escapar pero no puede porque los pies se le hunden en la arena. Un alarido y uno abre los ojos. El corazón late fuerte. Sólo fue un sueño.

Escena de un sueño: ¡Ayuda, seres marinos sin ojos se aproximan! (Corbis)

¿Cómo se convierte un sueño en pesadilla? ¿Qué escenas pasan por la cabeza de uno antes de que se despierte bañado en sudor? Dos investigadores de la Universidad de Montreal pidieron a 572 voluntarios que durante varias semanas llevaran un diario de sueños. Con ayuda de estas descripciones, Geneviève Robert y Antonio Zadra enumeran qué sentimientos, temas y escenas predominan en las pesadillas. En la revista "Sleep", los dos señalan la diferencia entre un mal sueño y una pesadilla: pese a que los malos sueños afectan negativamente, el soñador sigue durmiendo. Las pesadillas, sin embargo, despiertan a la persona.


Entre los 572 participantes en el estudio, que se reclutaron mediante anuncios, las mujeres eran mayoría. Para los resultados finales, los investigadores evaluaron sólo sueños de 331 participantes -275 mujeres, 55 hombres y una persona cuyo sexo no se especificó. Los 241 participantes restantes no reportaron haber sufrido malos sueños o sus descripciones eran demasiado cortas, demasiado vagas o contradictorias.

Miedo al fracaso e insectos espeluznantes

Los temas más comunes fueron los siguientes (los sueños pueden tener más de un tema):

A) Los ataques físicos, que juegan un papel en el 49 por ciento de las pesadillas y el 21 por ciento de los malos sueños.

B) Los ataques psicológicos, por ejemplo sobre el engaño o el rechazo, aparecen en el 21 por ciento de las pesadillas y el 35 por ciento de los malos sueños.

C) El fracaso o la impotencia fueron temas de alrededor del 17 por ciento tanto en las pesadillas como en los sueños malos.

D) La enfermedad, el miedo a la enfermedad, y la muerte de alguien en que se sueña o del soñador eran un tema en el 9 por ciento de las pesadillas y en el 14 por ciento de los malos sueños.

E) Los temas básicos restantes fueron menos frecuentes (entre cuatro y once por ciento de los sueños). Aquí se pueden encontrar: el miedo y la preocupación sin razón aparente, ser cazado, la presencia de algo maligno, los accidentes, los insectos, los acontecimientos extraños en el ambiente.

Adiós a la caída perpetua

Cuando la almohada parece peligrosa: las pesadillas convierten la noche en un tormento. (Corbis)

Bastante sorprendente: uno de los más famosos temas de las pesadillas -la caída- se produjo en sólo el 1.5 por ciento de las descripciones. Por lo tanto, era tan raro que Zadra y Robert ya no la pusieron en una categoría aparte, sino en "accidentes". Y ningún voluntario reportó haber soñado que estaba paralizado o asfixiándose. Pero al preguntar a la gente qué pesadillas recuerda, estos elementos aparecen antes que nada. Probablemente porque se destacan por ser angustiantes, sospechan los psicólogos canadienses.

El miedo fue la emoción más frecuentemente asociada a los malos sueños y pesadillas. Los voluntarios también reportaron haber sentido tristeza, ira, confusión, disgusto, decepción,  vergüenza y en cerca de cuatro por ciento de los casos, incluso emociones positivas.

Otra diferencia entre los malos sueños y las pesadillas, según el estudio: aunque los malos sueños son más extraños de lo normal, las pesadillas son particularmente bizarras. Es decir, incluyen con más frecuencia que el promedio lo imposible o algo que contradice fuertemente al sentido común.

Uno de los métodos para defenderse de las pesadillas, lo indican los diarios de sueño: se despertaron intencionalmente ellos mismos. Ser conscientes de que todo es sólo un sueño e influir en los acontecimientos en consecuencia -para convertirlos en algo positivo o despertar - es una de las posibles estrategias cuando el cine mental nocturno es demasiado desagradable. Alternativamente, puede ser útil hacer frente a la pesadilla durante el día y darle en el pensamiento un desarrollo positivo. Cada quien puede reflexionar en qué se transformará la gente de mar sin ojos. (Nina Weber / Der Spiegel / Traducción Libertad de Expresión Yucatán)