martes, 11 de abril de 2017

abril 11, 2017
WASHINGTON D.C., 11 de abril de 2017.- El portavoz de la Casa Blanca Sean Spicer protagonizó este martes la última polémica del equipo de Donald Trump con la comunidad judía. En medio de una explicación sobre el ataque estadounidense de la semana pasada sobre una base aérea siria, Spicer argumentó que Bachar Al Assad es peor que Adolf Hitler porque éste “ni siquiera cayó tan bajo como para usar armas químicas”.

Las caras de los periodistas presentes en la sala de prensa sirvieron como presagio al revuelo causado por estas palabras del máximo portavoz de la Administración Trump. Apenas unos minutos después de terminar la comparecencia de Spicer, la Casa Blanca emitió un comunicado en el que el portavoz asegura que “de ninguna manera estaba intentando rebajar el horror del Holocausto”.

Adolf Hitler "didn't even sink to using chemical weapons", dijo textualmente Sean Spicer.

Spicer afirma que lo que pretendía hacer era una distinción entre la técnica utilizada por el presidente sirio, que bombardeó a la población civil con armas químicas, de la empleada por Hitler. “Cualquier ataque sobre personas inocentes es censurable e inexcusable”, añadió el portavoz. Sin embargo, Spicer no ha hecho alusión ni en la sala de prensa ni en su comunicado al hecho de que la Alemania nazi ejecutara a millones de judíos en cámaras de gas instaladas en los campos de concentración.

“Nosotros no usamos armas químicas en la Segunda Guerra Mundial. Había una persona tan detestable como Hitler que ni siquiera cayó tan bajo como para utilizar armas químicas”. El portavoz se refirió después a Rusia para explicar que este país debe preguntarse si Siria “es el tipo de nación con la que quieren aliarse”.

Cuando uno de los periodistas le pidió después que explicara estas palabras, Spicer intentó aclarar que Hitler “no utilizó el gas contra su propio pueblo de la misma manera que lo está haciendo Assad” y que el líder alemán “les llevó sin embargo a los centros del Holocausto”. Las dudas sobre si Spicer se refería a las cámaras de gas o a los campos de concentración, sin usar su nombre de manera específica, solo empeoró el problema.

Antes de que terminara la comparecencia del portavoz, algunas cadenas de televisión estadounidenses, como hizo MSNBC, corregían la declaración de Spicer. “Casa Blanca: Hitler no cayó tan bajo como para usar armas químicas como el líder sirio”, decía uno de los titulares. “(Hitler gaseó a millones)”, añadieron a continuación.

El Centro Anne Frank ha emitido un comunicado en el que su director asegura que Spicer “carece de la integridad para servir como secretario de prensa de la Casa Blanca y debe ser despedido por Donald Trump inmediatamente”. El Museo del Holocausto en Washington también ha enviado este mensaje con un vídeo que muestra “lo que descubrieron las fuerzas estadounidenses” al liberar el campo de Buchenwald.

El equipo de comunicación del presidente ya se ha visto envuelto en polémicas similares en apenas 12 semanas de gobierno. La última ocurrió el pasado Día Internacional para la Memoria del Holocausto, cuando el comunicado de la Casa Blanca no incluyó una referencia literal a la comunidad judía. Trump también fue acusado de promover ideas y simbología antisemita en varios mensajes durante la campaña electoral. 

"Sean Spicer debe ser despedido y el presidente tiene que rechazar los dichos de su vocero inmediatamente", dijo la legisladora demócrata Nancy Pelosi.

Y agregó: "O bien habla en nombre del presidente o el presidente debería haberlo pensado mejor al momento de contratarlo".

Tras las declaraciones, "Sean Spicer" se volvió tendencia en la red social Twitter y algunos usuarios comenzaron a usar la etiqueta en inglés #Icantbelievehereallysaidthat ("no puedo creer que realmente acaba de decir eso").

"Que alguien le dé un curso de historia sobre Hitler al secretario de prensa", tuiteó el senador demócrata Ben Cardin, usando la etiqueta.

También le aclaró que no se dice "centros del Holocausto", sino "campos de concentración".

"Espero que el secretario de prensa se tome un tiempo para visitar el Museo del Holocausto. Está a unas pocas cuadras", tuiteó Chelsea Clinton, hija de los políticos Hillary y Bill Clinton.

Por su parte, el Centro Ana Frank para el Respeto Mutuo, una organización independiente estadounidense que trabaja en defensa de los derechos humanos, pidió a Trump que destituyera a Spicer por "negar el Holocausto".

Spicer, la cara más visible del gobierno de Trump después del propio presidente, suele ser el foco de críticas e incluso de bromas por sus conferencias de prensa, donde ha perdido el temperamento y acusado a los medios de promover "noticias falsas".

Sin embargo, la periodista de la BBC Katy Kay se pregunta si Spicer sigue teniendo "el total apoyo del presidente": "Con el Centro Ana Frank pidiendo su inmediata destitución, el secretario de prensa está bajo presión".  (Cristina Pereda / El País)