miércoles, 6 de mayo de 2015

mayo 06, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 6 de mayo de 2015.- Don José Arsenio Canul Canul es uno de los pocos “horqueteros” que quedan en la ciudad, un oficio característico en esta región peninsular que poco a poco ha ido desapareciendo en Mérida, a pesar de que los productos que ofrece todavía son útiles para las amas de casa.

Su oficio lo satisface en todos los sentidos, asegura, de modo que él no busca un “mejor” trabajo. Lo que necesita, explica, es capital para renovar sus herramientas y continuar trabajando, comenzando por su viejo triciclo de 19 años de antigüedad.

“Pero no hay quien me quiera prestar dinero. Yo le aseguro que soy buena paga”, le dijo don Arsenio a Francisco Torres Rivas durante un breve encuentro en calles de la colonia Mayapán cuando pedaleaba su triciclo repleto de horquetas para vender.



El humilde hombre reconoció a la distancia al candidato del PRI y Verde Ecologista en el IV Distrito Federal y, alzando la voz, lo llamó: “¡Panchito!”. Enseguida se acercó y descendió de su sencillo transporte para saludarlo.

Torres Rivas hizo una pequeña pausa en su caminata para conocer su historia. Relató que a sus 65 años se siente pleno y realizado con su oficio, que le ha permitido vivir modestamente junto con su esposa en la colonia Plan de Ayala, al sur de la ciudad.

“Soy muy feliz vendiendo horquetas, es mi propio negocito y nadie me regaña o me grita. Y mi esposa también está feliz porque diario le dejo el gasto”.

No sabe leer ni escribir “porque nunca me gustó ir a la escuela”. A los 21 años inició su oficio de “horquetero” con el cual ha subsistido en forma honesta.

“Lo poco que tengo en mi casita lo he comprado con mi trabajo. Todos los días me despierto antes de que salga el sol; me meto al monte a cortar ramas grandes de uaxim (árbol típico de la región), es la madera más resistente. Luego las trabajo para hacer las horquetas”, comentó.

Luego de buscar la madera y tener “stock” de venta, sale a las 7 de la mañana recorriendo los cuatro puntos cardinales de la ciudad. Diariamente vende entre 15 y 20 horquetas.

“Termino como a las 11 de la noche. Almuerzo lo que puedo durante el camino; a veces mis clientes me regalan comida, tengo bastantes conocidos. Hay clientes que me conocen de años y me esperan por sus horquetas, pero siempre ando buscando nuevos”, relató.

Torres Rivas lo felicitó por su dedicación y perseverancia, y ofreció gestionarle un triciclo nuevo, pues el actual ya muestra todo tipo de reparaciones y remiendos.

“Personas como usted, que son ejemplo de trabajo y tienen ganas de salir adelante aun sin estudios, podrán ser beneficiadas con los créditos sin aval que impulsa nuestro candidato a la presidencia municipal de Mérida, Nerio Torres Arcila”, le explicó “Panchito” Torres.

Recordó que una de las propuestas para Mérida es precisamente dinamizar la economía de la capital yucateca y ofrecer créditos sin aval para impulsar y preservar el autoempleo.

Los beneficiarios serían mujeres, jóvenes, adultos mayores y personas con discapacidad.

Torres Rivas le dijo a don Arsenio: “Hay personas como usted, que se dedican a antiguos oficios típicos de la región y este proyecto es para ustedes, no sólo para preservar su oficio y conservar su fuente de ingresos, sino para crecer e incluso dar oportunidad de empleo a otras personas”.