jueves, 15 de agosto de 2013

agosto 15, 2013
Eduardo Ibarra Aguirre / Utopía 1290 / 16-VIII-13

Ocho veces superiores al crecimiento de la economía nacional previsto para 2013, fueron las utilidades obtenidas en el primer semestre de 2013, por los 21 grupos financieros que operan en México, y que en conjunto sumaron 61 mil millones de pesos, lo que a juicio de Roberto González Amador es “un monto sin precedente, al representar un crecimiento de 17.9 por ciento respecto de las que obtuvieron en el mismo periodo de 2012".

Las cuantiosas utilidades de los 21 controladores financieros quedaron concentradas en tres que dominan el sector y que son extranjeros, de la siguiente manera: BBVA Bancomer que en el primer semestre acumuló ganancias por 22 mil 104 millones de pesos; Banamex, con utilidades por 10 mil 643 millones, y Santander con 8 mil 860 millones. Sólo figuran como cuarto y quinto beneficiarios dos grupos mexicanos, Banorte, de la familia del difunto Roberto González Barrera, con 6 mil 413 millones de pesos de utilidades, e Inbursa, de Carlos Slim, con 5 mil 91 millones de pesos. Todas las cifras anteriores corresponden a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, organismo regulador del sector.



Ahora que ofrecen las perlas de la virgen con la iniciativa de ley sobre la reforma energética, resulta pertinente recordar el destino final que tuvo la banca mexicana que a partir de Carlos Salinas, Ernesto Zedillo y Vicente Fox no sólo fue privatizada, después rescatada con el llamado endeudamiento del siglo, el Fobaproa que pagan los causantes de ésta y varias generaciones más, sino vendida a consorcios trasnacionales que hacen su agosto en México al cobrar tres y cuatro veces más por los servicios que brindan en sus países de origen, con la connivencia de las autoridades, sin generar más plazas laborales, precarizando las condiciones de trabajo de los asalariados bancarios e, insisto, esquilmando a los usuarios de los servicios financieros.

Justamente ahora que para persuadir de las bondades de la reforma energética presidencial se ofrecen: “cientos de miles” de nuevos empleos bien remunerados, electricidad y gas más baratos –la Comisión Federal de Electricidad, “Una empresa de clase mundial”, compra a privados casi el 40 por ciento de la energía que distribuye sin ningún abaratamiento–, fertilizantes suficientes y baratos, y una mayor producción de alimentos a mejores precios, conviene subrayar que la privatización y también la extranjerización de la banca demuestran todo lo contrario de lo que postularon el trío de presidentes formados en las filas de los partidos tricolor y blanquiazul.

En un arrebato de honestidad intelectual, Héctor Aguilar Camín reconoció en Forotv, hace tres o cuatro lunes, que las privatizaciones de los últimos 31 años no funcionaron para modernizar la economía y tampoco para beneficiar a las mayorías, con la excepción “quizá” de Teléfonos de México. Pero hoy él es uno de los principales impulsores de la energética, con cargo a Televisa.

El rango de la superioridad porcentual del crecimiento de las utilidades de la banca respecto al previsible crecimiento de la economía en 2013, depende de la fuente de referencia que se adopte, pues el 7 de agosto el Banco de México redujo a un rango de entre 2 y 3 por ciento la previsión sobre el desempeño del producto interno bruto; un día después, BBVA Bancomer, el principal grupo financiero del país, lo redujo de 3.1 a 2.7 por ciento; el día 13 Banamex ajustó de 2.7 a 2 por ciento su pronóstico de crecimiento para este año.

Pronósticos aparte, el hecho documentable es que los dueños de México, extranjeros y nacionales, que ahora pujan por el petróleo, el gas y la electricidad son voraces, insaciables.

Acuse de recibo

Del periodista Ramsés Ancira sobre La fiesta que no alegró a muchos (14-VIII-13): “La UNAM tiene grabada la voz de Lázaro Cárdenas quien dice (…) que la expropiación se debe a la voracidad de las empresas extranjeras quienes dan confort y lujo a los trabajadores de fuera, mientras que para los nacionales no hay ni mosquiteros, ni campos deportivos siquiera. (…) En 1934 Cárdenas cayó en el garlito con la promesa de que se crearían empleos para los mexicanos y autorizó la participación foránea, pero la rapacidad del capitalismo lo hizo ratificar de inmediato. Lo que hace el PRI y sus publicistas es una manipulación insultante de la historia”… “No sólo me sumo a la propuesta de boicot a esa feria (Internacional del Libro en Pachuca, Hidalgo), sino que propongo una carta abierta, para exigir a Hacienda que cancele el presupuesto a la universidad de Hidalgo, igual a la de Tamaulipas, también manejada por auténticos hampones, discípulos del Yuca, quien fue el cacique por unos 15 años antes de ser defenestrado por otros algo peores, socios del cártel del Golfo. Y una auditoría a la BUAP, donde los clanes de excomunistas, Doger Corte, Doger Guerrero, etcétera, han salido millonetas, con mansión y alberca bajo techo, pero superados por Quique Agüera, con avión privado y negocios turísticos en Cancún”. El comentario es del editor Gustavo Cortés Campa.