lunes, 24 de marzo de 2014

marzo 24, 2014
Gilberto Avilez Tax

¿Cuándo comprenderán esas personas de buen corazón, que no me interesa saber los apoditos de la novia, del novio o del amante, la primera caquita del bebecito de mamá, o el dar a gracias a Dios a sus muertos queridos y su "vida nada me debes, vida estamos en paz"?

Pero eso es lo de menos, los personajes más siniestros y simiescos del facefucho, considero, son los guerrilleros virtuales, esos indigestos, ecologistas, zoofílicos, rojos, apabullantemente radicales, pero siempre y cuando su radicalidad se haga desde un cómodo y muelle sillón (y si es con aire acondicionado, mucho mejor, ya que la calor, etc).

Esos especímenes ridículos que escriben como si a su teoría se los dieran en supositorio, a cuatro patas y por el mero culo, desde las seis am andan despotricando contra el perro mundo, que quesque el Fondo Monetario, quesque cómo chingan de bonito el "imperio", citando a lo bestia a sus caros teóricos que en mi puta vida me interesa en lo más mínimo leer.

Sin duda, esos animales son la parte más indecente de la humanidad.

Yo considero, es mi radical opinión, que si uno no está dispuesto a llevar a la práctica su cagalera verbal-virtual, mejor cállese, o siendo precisos, mejor chúpese un limón porque, desde luego, no deseo vivir en la idea del mundo que tienen estos chancros del facefucho.