MÉRIDA, Yucatán, 29 de diciembre.- La tarde de hoy, el periodista Óscar Rodríguez Hernández acudió ante la oficina regional de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para entablar una queja por la agresión de la que fue víctima la mañana del pasado viernes 19 de diciembre.
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| El reportero acudió a las oficinas de la CNDH para presentar un escrito donde narra los hechos relativos a la agresión de la que fue blanco cuando ejercía su profesión y la poca respuesta que ha tenido de las autoridades a su petición de justicia (Fotos: JMRM) |
Como informamos en su momento, Rodríguez, reportero de La Verdad Yucatán, fue atacado por 3 inspectores del Ayuntamiento de Mérida cuando documentaba un decomiso en los alrededores de la Plaza Grande.
Los trabajadores municipales, indicó, le arrebataron su mercancía a una pequeña chiapaneca en el Parque Hidalgo sin tan siquiera documentar el acto, tras lo cual siguió a los mencionados, quienes caminaban con dirección a la Catedral, para tomarles fotos. En respuesta, uno de ellos se le fue encima, por la espalda, causando que cayera su teléfono celular, con el que capturaba las imágenes, tras lo cual el aparato fue pisoteado por sus agresores.
"Uno de ellos me atacó en dos ocasiones, pues al parecer les molestó que los descubriera realizando de manera arbitraria su labor", expresó.
"Uno de ellos me atacó en dos ocasiones, pues al parecer les molestó que los descubriera realizando de manera arbitraria su labor", expresó.
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| ABC Mundial, Canal 13, La Verdad Yucatán, Libertad de Expresión Yucatán y Por Esto! fueron algunos de los medios que acudieron a dar cobertura a la entrega de la queja. |
A pesar de que Alicia Triay Mena, Subdirectora de Medios y Antonio Puc Sabido, Jefe de Prensa del Ayuntamiento de Mérida aseguraron que restituirían su teléfono, Hernández expresó su molestia por el hecho de que el alcalde Renán Barrera Concha no haya hecho, hasta la fecha, comentario alguno sobre el incidente.
"Yo confío en las autoridades, hasta el momento no me ha han amenazado", expresó el reportero, quien tiene 21 año de trayectoria profesional y 3 años residiendo en la entidad.
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| "Han pasado diez días de las denuncias y de intentos de acercamientos con el gobierno de Renán Barrera sin que haya avance alguno ni de la Comuna, que prometió una investigación. En la Codhey no he sido notificado de nada, mucho menos en la PGR", expresó Óscar Rodríguez a los comunicadores presentes. |
El escrito presentado por el quejoso, que incluye dos fotografías de los inspectores, será analizado por la CNDH para determinar si procede o no.
Rodríguez Hernández indicó que decidió acudir ante la Comisión debido a la lentitud y opacidad con la que han procedido el Ayuntamiento de Mérida y la Codhey.
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| El periodista muestra los daños que sufrió su celular a causa de la agresión perpetrada por los trabajadores municipales. |
El mismo día que se registró la agresión, Óscar Rodríguez acudió ante la delegación de la PGR con el fin de que fuera canalizada su queja ante la Fiscalía Especializada en delitos contra periodistas.y la Codhey para dar constancia de los hechos, que cabe recordar fueron denunciados públicamente durante la sesión de cabildo del pasado 20 de diciembre por el regidor de oposición Rubén Segura Pérez.
Al ingresar a la recepción para presentar su queja, la visitadora adjunta Beatriz de los Ángeles Rosique Colorado indicó a los reporteros que asistieron para dar cobertura al hecho que no podían tomar fotos ni grabar video en el interior del edificio, desistiendo cuando uno de los comunicadores razonó con ella.
La oficina regional de la CNDH está a cargo del delegado Omar Arturo Pacho y Sánchez, quien se encuentra de vacaciones.(JMRM con información de Óscar Rodríguez)
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| El documento, que detalla los atropellos perpetrados por personal de la Comuna meridana, fue recibido por Marco Antonio Puenco (izquierda). |
Al ingresar a la recepción para presentar su queja, la visitadora adjunta Beatriz de los Ángeles Rosique Colorado indicó a los reporteros que asistieron para dar cobertura al hecho que no podían tomar fotos ni grabar video en el interior del edificio, desistiendo cuando uno de los comunicadores razonó con ella.
