miércoles, 4 de junio de 2014

junio 04, 2014
MÉRIDA, Yucatán, 4 de junio.- Por su vocación docente y amor a su profesión, valores que los ha distinguido toda su vida, 4 académicos del Campus de Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) fueron galardonados el día de hoy en el marco inaugural de la 22ª Semana Científica y Cultural de la Facultad de Enfermería y de las actividades conmemorativas del 181 aniversario de la Facultad de Medicina.

Ana Elena Marrufo Couoh y Fanny Interián Cocom, de la Facultad de Enfermería así como Raúl Bracamonte Novelo y Luis David Arjona Canto, de la Facultad de Medicina, recibieron sendos reconocimientos por su trayectoria profesional y como docentes comprometidos con la formación de las nuevas generaciones de profesionales universitarios.


Coincidentemente para los académicos universitarios lo importante no es lo material sino la vocación de servicio a los semejantes Ana Elena Marrufo, actual secretaria administrativa de Enfermería, reitera que “esta disciplina requiere de vocación, es decir, procurar por el bien de las personas”.

De igual manera para el cardiólogo Luis David Arjona Canto los jóvenes que “aspiran a estudiar medicina, primero deben conocer si tienen o no vocación; si la tienen serán brillantes sino muy buenos”, enfatizó y además recomendó “no dejarse llevar porque papá es médico y tampoco por tener el estetoscopio colgado en el cuello de la bata blanca, el olor a lavanda o el coche de lujo”.


Asimismo para Fanny Interián Cocom el reconocimiento de la comunidad de enfermería representa una enorme satisfacción “estoy agradecida con las autoridades universitarias, con mis compañeros profesores y desde luego con los estudiantes” y afirmó que “trabajar tres décadas en la Universidad ha sido un abrir y cerrar de ojos, me siento muy bien y estoy lista para continuar apoyando en la formación de las nuevas generaciones de profesionales”, agregó la responsable de los laboratorios de enseñanza.


Para el neumólogo Raúl Bracamonte Novelo, impulsor en la década de los años setenta de la Inhalo-terapia, tratamiento utilizado para el control de enfermedades como el asma, “mi labor como maestro fue consciente, objetiva y comprometida siempre con los avances de la enseñanza de la medicina y en particular de la neumología. Agradezco a la Facultad de Medicina lo mucho que nos ha dado y sin pedir nada a cambio”.

En la inauguración de la 22ª Semana Científica y Cultural de la Facultad de Enfermería, Carola Salas Ortegón, directora del plantel, dijo que esta actividad se realiza en un importante momento porque “ambos programas de licenciatura (Enfermería y Trabajo Social) forman parte del Padrón Nacional de Programas Educativos de Alto Rendimiento”.

Ante José de Jesús Williams, director general de Desarrollo Académico y representantes de los sectores de salud, desarrollo humano y social, la directora de Enfermería detalló que durante la semana académica y científica se abordarán temas como la prevención de adicciones, bienestar subjetivo y capital social, desarrollo comunitario en la Unidades Universitarias de Inserción Social, Sensibilización Ambiental, Perspectiva de Género y Movilidad Estudiantil.

Por otra parte, en el evento inaugural de los festejos del 181 aniversario de la Facultad de Medicina, Alfredo Dájer Abimerhi, rector de la casa de estudios, subrayó que “la larga historia de la medicina refleja una de las preocupaciones fundamentales de la sociedad: el cuidado de la salud”.

Aseveró que “la excelente comunicación hace que Mérida sea un polo de atracción por sus hospitales y servicios médicos así como el acceso a la educación de alta calidad en las ciencias de la salud” y rememoró que los inicios de la Facultad de Medicina se remontan a 1833 cuando Ignacio Vado Lugo recibió el encargo de crear y dirigir el programa de estudios y fue “así como comenzó la historia de éxito de este plantel universitario”.

También se refirió a las actuales instalaciones que ocupa la facultad, “edificio inaugurado en 1952 y 62 años después continua albergando a miles de profesionales en favor del bienestar de la sociedad”, afirmó el Rector de la Universidad quien aseguró que “tenemos una Facultad fortalecida con una oferta educativa de tres licenciaturas de calidad y 21 programas de posgrado”.

“Un plantel moderno y bien equipado en sus laboratorios, aulas y biblioteca, fortalecido con el trabajo de otras facultades del campus y con una planta de profesores desarrollando líneas de investigación sobre envejecimiento, enfermedades infecciosas, control de vectores, manejo de plaguicidas, determinantes políticos de la pobreza e implicaciones en la salud, obesidad, mal nutrición y enfermedades cardiometabólicas”, explicó.

En la misma ceremonia Guillermo Storey Montalvo, director de Medicina, reafirmó que “con 181 años de historia la Facultad se mantiene como referente académico por el impacto de sus programas académicos. Se distingue como una dependencia universitaria que rinde cuentas a la sociedad que la sustenta, apoyada en sus programas de formación profesional acreditados por organismos externos, por la calidad de su planta académica y por el desempeño de sus estudiantes que egresan demostrando sus competencias con éxito en el ejercicio de su profesión”.

“Médicos, nutriólogos, rehabilitadores ocupan puestos estratégicos en instituciones educativas y de salud participando en la toma de decisiones orientadas en garantizar el bienestar y la calidad de vida de la población favoreciendo que Yucatán se mantenga como polo natural de atención de la salud”. Aseguró también que esta efeméride “es un buen momento para reflexionar e identificar retos y oportunidades para la UADY y para su visión hacia el 2020”.

“Contar con el Modelo Educativo para la Formación Integral (MEFI) impulsa las políticas institucionales en favor de la calidad y la mejora continua facilitando la implementación de acciones prioritarias para fortalecer y modernizar la infraestructura, la habilitación docente en la aplicación de corrientes pedagógicas modernas y el uso de las tecnologías”, aseguró antes de concluir su intervención reconoció “la necesidad de formar a las futuras generaciones con una visión global para desempeñarse en cualquier lugar del mundo pues el fenómeno de la salud-enfermedad-medio ambiente compete a todo el planeta, sin importar fronteras”.