lunes, 10 de abril de 2017

abril 10, 2017
LONDRES, 10 de abril de 2017.- Una británica de 13 años se ha convertido en la primera menor del Reino Unido en recibir un corazón artificial al considerar los médicos que ésa era la única vía para mantenerla con vida mientras esperaba un donante, informa hoy The Guardian.

La adolescente Chloe Narbonne, natural de Worcester (norte de Inglaterra), se sometió el 1 de mayo de 2016 a una compleja e innovadora operación de nueve horas, en la que intervinieron 30 profesionales médicos en el Royal Brompton, un hospital especializado en corazón y pulmón de Londres.

La complicada intervención se llevó a cabo después de que le hubiera fallado un trasplante previo y ante la falta de otras opciones.

Chloe Narbonne con su mamá, Fabienne. (David Levene / The Guardian)

Ese corazón artificial logró mantener con vida a la niña durante varias semanas críticas, hasta que recibió uno de un donante.

Aunque otros pacientes han recibido anteriormente ese dispositivo, conocido como “corazón de Berlín“, Chloe es la persona más joven del país a la que se le ha implantado.

“Me siento bien, como mi ‘yo’ normal, pero no exactamente, no después de lo que he pasado. Supongo que el corazón artificial fue mi salvavidas; es lo que me ha mantenido viva hasta que me llegó otro corazón. Por lo que he pasado, es algo que te cambia la vida”, dijo la niña al citado diario.

La menor fue diagnosticada con una cardiomiopatía dilatada cuando tan solo tenía cuatro semanas de vida y su corazón comenzó a fallar al alcanzar los 11 años.

Cuando ese primer trasplante no funcionó, la adolescente estuvo al borde de la muerte y fue en ese momento cuando los médicos optaron por implantarle el corazón artificial como única solución hasta que se le pudiera realizar otro trasplante.

André Simon, director de la unidad de trasplantes de corazón y pulmón del hospital Royal Brompton, André Simon, fue el responsable de esta difícil operación.

Su madre, Fabienne Narbonne, consideró “un milagro” la intervención y apuntó que “sin el corazón artificial estaría muerta. La mantuvo con vida durante esas semanas cruciales”.

El citado especialista, que ha practicado trece operaciones con corazones artificiales en hospitales londinenses, cree que el éxito de la intervención a Chloe debería alentar a otros médicos a considerar esa opción para salvar a otros menores.

Según cifras que proporciona el periódico, solo 1,690 personas en todo el mundo han recibido un corazón artificial, de las cuales 34 eran menores de 18 años. (EFE)