José Repetto
Muere una persona y se asoman los buitres. Hoy por la tarde habrá una marcha por el deceso de Ema Gabriela Molina Canto, asesinada el pasado lunes a las puertas de su casa.
Se convocó a la manifestación en el Diario de Yucatán, y bien sabemos que ese medio no publica nada si no le pagan, por lo cual queda claro que hay intereses detrás de esta protesta ¿ciudadana?, que posiblemente sea promovida por algún cliente de Grupo Megamedia, tal como el Comité Estatal del PAN, o bien sea usada para sacarle más dinero a otro anunciante.
Las reacciones al deceso de la madre de familia, de 42 años, fueron innumerables. Hubo indignación legítima, tal como la de la regidora Milagros Romero Bastarrachea, de Movimiento Ciudadano, quien nos consta sí apoyó a la víctima y a su madre en varias ocasiones y no temió alzar la voz cuando se le pidió apoyo. Es de reconocerse y esperaríamos que todos los regidores y diputados actúen igual ante cualquier caso donde sepan que un ciudadano es violentado.
Hubo respeto por parte de casi todos los integrantes del Cabildo, más allá de la leve falta de tacto del regidor Rudy Pacheco de referirse al caso como algo "aislado". Otra intervención salió sobrando, pero queremos pensar fue con buena intención.
En reacción al asesinato, se hizo lo conducente por parte de las autoridades a nivel estatal -las que están actualmente en el cargo- y municipal. Se capturó a los asesinos y se garantizó que los hijos de la víctima no quedaran a su suerte.
Para bien o mal, no se puede asignar un policía para cuidar a cada ciudadano las 24 horas. Tampoco existe la tecnología presentada en películas como Minority Report que permita a las fuerzas del orden saber cuándo un ciudadano está a punto de cometer un crimen y detenerlo.
Hablar sobre prevenir un asesinato, como si las autoridades de cualquier nivel tuvieran el poder de teletransportarse a cualquier lugar y ver todo lo que pasa, es de plano querer sacar raja del asunto.
Sin embargo hubo indignación legítima pues en este caso, hay que decirlo, algo falló, y ciertamente no es un desenlace aceptable.
Pero también hubo oportunismo rapaz y reacciones histriónicas y ridículas.
¿Quiénes estaban rondando alrededor -como zopilotes- de la madre de la víctima al día siguiente del crimen, cuando declaró ante los medios? ¿quiénes aprovecharon la situación para meter su tema político y términos como "alerta de género" y "feminicidio"?
¿Qué tan poca vergüenza hay que tener para decirle a una madre que acaba de perder a su hija qué declarar ante la prensa, para usarla como medio para promover una agenda?
El oportunismo se extiende a partidos supuestamente de oposición como el PAN y Morena que exigen justicia cuando sus dirigencias nunca hicieron nada por Ema Gabriela, legisladores que no tocaron su tema previo a la tragedia y ciertas organizaciones civiles como Poder Ciudadano Colectivo 4 de Julio.
Estos últimos son los que más descaro han mostrado en su afán por darse a conocer a costa de este tema con un video en el que aprovechan salir casi todos y que se les vea. A ver si, ahora sí, se hace viral, pues falta poco para 2018.
Figuraron sin decir nada y con pose dramática José Luis Sierra Villarreal, Alfonso Peniche Manzano, Antonio Plascencia Gómez y Armando Torre Puerto. Llama la atención que varios simplemente no dieron la cara, tal vez porque veían que era de mal gusto usar el tema para figurar.
