sábado, 4 de febrero de 2017

febrero 04, 2017
BOGOTÁ, Colombia, 4 de febrero de 2017.- Apenas un día antes de su llegada a Colombia para hablar de paz, Lech Walesa (Popowo; 1943) se ha visto sorprendido por un nuevo capítulo en una acusación que le persigue desde 1990 y que ha provocado diversos debates en Polonia sobre su figura. Una investigación del Instituto de la Memoria Nacional (IPN), basada en análisis de expertos grafológicos, acaba de confirmar su supuesta colaboración con la policía comunista a principios de los años 70.

"Es una conspiración orquestada para ensuciar mi nombre", se defiende en una entrevista con EL MUNDO el histórico líder del sindicato Solidaridad, referente de la lucha obrera y emblema de la oposición al autoritarismo soviético, por lo que estuvo en prisión.

Lech Walesa, ex presidente de Polonia y Nobel de la Paz. (KACPER PEMPEL / REUTERS)

El ex presidente polaco (gobernó entre 1990 y 1995) se encuentra en Bogotá, donde participa en la Cumbre Mundial de Premios Nobel de Paz, que él recibió en 1983. "En esta época donde triunfan gobiernos populistas como el de mi país o el de Donald Trumpen Estados Unidos, la paz es lo más importante a lo que puede aspirar una nación", dice.

Walesa lleva en la solapa de su chaqueta un pin de una paloma blanca (un guiño al acuerdo de paz que el presidente anfitrión, Juan Manuel Santos, alcanzó con la guerrilla de las FARC a finales de año) junto a la insignia de la virgen negra Czestochowa, símbolo de su país y de sus creencias católicas. Durante la conversación advierte sobre el auge de los nacionalismos xenófobos y apunta a "la necesidad de refundar Europa".

¿Niega las acusaciones que se han vertido contra usted?
    Claro que las niego. Yo siempre he tenido mi concepto de la lucha y he cumplido. Por aquella época, durante la Unión Soviética, hice lo único que podía. Luché todo lo que estuvo en mis manos, no me arrepiento de nada. Otros grafólogos van a demostrar lo que digo. Ellos han utilizado a sus expertos y yo usaré a los míos.

¿Quién son "ellos", quién ha orquestado esa "conspiración" contra usted?
    La policía política en los 70 falsificó esos documentos con los que me acusan. Entonces no podían luchar contra mí de otra manera y así querían ensuciar mi imagen. El actual Gobierno en Polonia ha recuperado este tema para intentar silenciar mi voz. Quieren reescribir la Historia. [El partido Ley y Justicia ganó las elecciones en 2015. Desde entonces, todos los meses hay manifestaciones de amplios sectores sociales por lo que consideran "un giro ultraconservador" del líder Jaroslaw Kaczynski. Walesa es una de las voces opositoras que denuncian un creciente control judicial y mediático y una reducción de las libertades civiles]

¿Está de acuerdo con aquellos que llaman a Kaczynski "el Trump polaco"?
    Totalmente, ambos son demagogos y destruyen cosas valiosas. Me da miedo pensar el daño que va a causar en Polonia. Quiere destruir el legado de todo lo que logramos con Solidaridad, pero no lo va a conseguir, las protestas seguirán hasta que deje el poder.

¿Usted está dispuesto a encabezar el movimiento de oposición?
    No, hay gente más joven y mejor preparada, pero sí que seguiré involucrado. Ellos ganaron las elecciones gracias a un mensaje populista. Hay que aceptarlo, no se puede luchar contra la democracia. Ahora mismo el país está dividido al 50%. Calculo que en un año ese porcentaje se inclinará a nuestro favor, porque el Gobierno no tiene dinero para financiar sus promesas imposibles. Entonces será el momento del cambio.

¿Cómo explica el éxito del populismo?
    Es el resultado de una insatisfacción generalizada de los ciudadanos con la política tradicional. Si nadie les ofrece alternativas, es posible que opten por una opción radical. Trump prometió destruir las oligarquías enquistadas en el poder de su país y eso le bastó a la gente para votarle. Hay que seguirle muy de cerca, no hay que permitirle tomar decisiones internacionales importantes de forma unilateral.

¿Ve posible una alianza entre Estados Unidos y Rusia?
    La relación política entre Trump y Vladimir Putin apenas acaba de empezar. Cualquier acuerdo entre ambas potencias sería positivo, no creo que ninguno de los dos quiera una situación de guerra. Saben que eso supondría la destrucción mundial. Y nuestra sociedad tiene mecanismos para controlar estas cosas.

¿El Brexit en el Reino Unido es el comienzo del fin de la Unión Europea?
    Cuando la sociedad no ofrece soluciones para las personas, se despiertan demonios. La insatisfacción genera odios. Europa proyecta incertidumbre, necesita refundarse y ofrecer algo aceptable para todos sus ciudadanos. Si lo que hoy entendemos como Unión Europea se destruye, los países fuertes como Alemania, Francia o Italia deberán juntar fuerzas para proponer un nuevo sistema de alianzas que esté mejor preparado.

¿Tiene miedo a movimientos como el de Marine Le Pen en Francia?
    Son peligrosos y van a hacer daño, pero no me imagino que vaya a ir tan lejos como en la época de las victorias del fascismo y el nazismo. Estas opciones políticas son el caldo de cultivo de los dos más graves problemas de nuestra era: el auge del islamismo radical y el triunfo del populismo nacionalista

¿Cuál es su postura en el drama de los refugiados?
    Sólo hay una opción posible si eres un humanista: acogerlos hasta que sea necesario. Hay que solucionar el problema de los refugiados, aportando recursos para mejorar la situación en sus países de origen. Así todos ganamos. La solución es que puedan volver a sus países. (José Fajardo / El Mundo)