martes, 31 de enero de 2017

enero 31, 2017
MÉRIDA, Yucatán, 31 de enero.- Estudiantes y profesores de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UADY realizan cada miércoles una tarea especial, se trata de la revisión integral a los caballos caleseros, aquellos que se utilizan para el servicio turístico de paseos en carruajes por la ciudad.


La Universidad Autónoma de Yucatán a través de la Clínica de Grandes Especies del Campus de Ciencias Biológicas y Agropecuarias renovó por tercer año consecutivo, el acuerdo de colaboración con la Unión de Conductores y Pequeños Propietarios de Carruajes de Yucatán.

El coordinador de la Clínica, MVZ Esp. José Manuel Blanco Molina, manifestó que el punto central de la relación con los caleseros es brindar una atención integral y especializada a sus caballos y garantizar que puedan cumplir con las funciones diarias.

A partir de esta vinculación, la Universidad logra que sus estudiantes encuentren escenarios reales de aprendizaje, en este caso, en la medicina de equinos.

La agrupación de caleseros cuenta con unos 80 caballos, los cuales son revisados con base en la Cartilla Sanitaria de Identificación Equina, diseñada por la propia Facultad. En esta se registran los datos del propietario y del equino, así como el número de visitas y las acciones de inspección.

Blanco Molina precisó que se han dado casos de equinos que por no cumplir los valores promedios de salud han tenido que ser suspendidos para sus funciones.

Aclaró que, en estos casos, la Clínica emite las recomendaciones necesarias, pero es la agrupación la encargada de suspender al animal. En lo que va del acuerdo, estos casos han sido de entre un 10 o 15% del total de equinos de la agrupación.

Blanco Molina destacó que de esta coordinación se ha logrado generar mayor conciencia en los propietarios de los caballos sobre la importancia del monitoreo que deben prestar a sus animales.

Adicionalmente, también se incide en la sociedad en general, en relación a que los caballos son animales de trabajo que pueden realizar estas jornadas, esto en la medida que presenten buenas condiciones físicas y de salud.

La Clínica de Grandes Especies del Campus recibe unos 4 o 5 caballos cada semana, los cuales pasan por una revisión rutinaria que incluye dientes, lengua, pelaje, condición física y de salud en general y herrajes.

La revisión también incluye condiciones neurológicas y de tipo digestivo.

La clínica realiza el diagnóstico y se informa al propietario para iniciar con los servicios, los cuales tienen un costo accesible para los integrantes de la agrupación.

Los estudiantes de Medicina Veterinaria realizan las inspecciones necesarias a los animales y con apoyo de los profesores, determinan la valoración y diagnóstico correspondientes.

Como parte de la inspección, los jóvenes se involucran en todo el proceso y observan las reacciones del animal, la temperatura, así como el andar del caballo, en pasos, trote y galope.

Las observaciones las registran en una bitácora, lo que permite dar el seguimiento oportuno al animal.

El coordinador de la Clínica citó las principales recomendaciones para este tipo de caballo de calesa, que son: estatura superior a 1.50 m., peso mínimo de 350 kgs., y de preferencia que sean castrados para evitar que sean agresivos en la vía pública.

Otra consideración es que reciban una dieta rica en granos y forraje, que cumplan con horarios de trabajo, tratando de que sean horas de menor intensidad de sol, sobre todo para el periodo abril-mayo, así también que se evite el galope y que reciban hidratación continua, entre otros. (Boletín)