martes, 13 de diciembre de 2016

diciembre 13, 2016
CIUDAD DE MÉXICO, 13 de noviembre de 2016.- La economía mexicana ya resintió un impacto en el costo del crédito para empresas y el aplazamiento de inversiones por la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, advirtió BBVA Bancomer, el principal proveedor de servicios financieros en el país. Sin embargo, la salida de aquel país del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) "no sería catastrófico", aseguró.

"El escenario base es que el nuevo gobierno de Estados Unidos actuará de manera moderada", dijo Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer. "Abandonar el TLCAN sería contraproducente para los tres países que lo forman" (México, Estados Unidos y Canadá), expuso en una conferencia de prensa.

Para México la salida de Estados Unidos del TLCAN tendría consecuencias, sostuvo, pero de manera limitada.

El economista en jefe de BBVA-Bancomer, Carlos Serrano (al centro), en conferencia de prensa esta mañana. (Foto Roberto González Amador)

Actualmente, el sector exportador aporta poco menos de un tercio del producto interno bruto (PIB).

Como los países del TLCAN también son miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC), México puede seguir exportando a Estados Unidos bajo el estatus de nación más favorecida, con un arancel promedio de tres por ciento para todos los productos, expuso Serrano.

"El incremento en el arancel entre el TLCAN y los vigentes para la OMC sería de tres por ciento. Eso es un impacto acotado, ni demasiado grave", aseguró.

Desde que Trump resultó electo presidente el 8 de noviembre pasado, ha habido consecuencias para la economía mexicana, dijo.

Citó que la incertidumbre respecto del efecto de las propuestas que Trump hizo como candidato (renegociar el TLCAN o gravar las remesas para construir un muro fronterizo) ha frenado algunas inversiones y elevado tasas de interés de mediano y largo plazo, como la de 10 años, además de una mayor depreciación del peso.

Por la pérdida de valor de la moneda habrá mayor inflación, aunque no "efectos de segundo orden", ello afectará el consumo porque reducirá el salario real (descontado el efecto inflacionario).

Habrá un impacto cíclico, de menor consumo e inversión, anticipó.

Carlos Serrano consideró que la discusión que se ha planteado en torno al TLCAN abre la oportunidad para generar acciones para incorporar a las regiones del sur del país al sector exportador, del que han quedado rezagados.

"Para hacerlo es necesario invertir en infraestructura", dijo. (Roberto González Amador / La Jornada)