MÉRIDA, Yucatán, 7 de diciembre.- El director de Finanzas y Tesorería del Ayuntamiento de Mérida, Juan Carlos Rosel Flores reiteró que la Ley de Ingresos para el 2017 no incluye alzas en impuestos existentes, no se crearán nuevos impuestos, no habrán alzas del Impuesto Predial y tampoco considera la contratación de nueva deuda pública.
El funcionario precisó que como cada año, la actualización del valor catastral en el valor de los inmuebles de los meridanos obedece a un mandato constitucional, que exige a los ayuntamientos de todo el País, otorgar certezas jurídicas a los ciudadanos en cuanto su patrimonio y al mismo tiempo cumplir con las directrices nacionales para evitar acciones de lavado de dinero mediante escrituraciones con valores falsos, la evasión de impuestos federales como el Impuesto Sobre la Renta, (ISR), los estatales como el Impuesto Cedular y los municipales como el Impuesto sobre la Adquisición de Bienes Inmuebles.
Rosel Flores recordó que en días pasados el Ayuntamiento aprobó la Ley de Ingresos para 2017 contemplando un incremento del 1% sobre lo recaudado este año, considerando que se tenga un presupuesto apegado a la realidad con metas objetivas y alcanzables, así como las expectativas macroeconómicas de México para el próximo año y conservar los niveles de recaudación históricos alcanzados en el 2016 independientemente del entorno económico.
Reiteró que se presentó ante el Congreso del Estado un proyecto de la Ley de Ingresos y de Hacienda que se apega a lo dispuesto en la Constitución Política del Estado de Yucatán, la Ley de Presupuesto y Contabilidad Gubernamental del Estado de Yucatán, la Ley General de Contabilidad Gubernamental y la nueva Ley de Disciplina Financiera entre otras; y lo más importante es que se contó con la participación de diversos organismos de la sociedad civil.
Agregó que sí se contempla un tema de derechos diferenciados para permisos de construcción como una medida regulatoria y no recaudatoria para, de acuerdo a los parámetros expresados en las sesiones públicas del Plan de Desarrollo Urbano (PDU), controlar el crecimiento de la ciudad y promover la redensificación urbana.
-Es un proyecto de Ley que además de contemplar mayores ingresos a los obtenidos en 2016 sin necesidad de dañar el bolsillo de los meridanos, incorpora por primera vez un esfuerzo valiente para empezar de una vez a regular y detener el crecimiento desordenado de nuestra ciudad-, concluyó.
Esta medida, continuó, ayudará a conservar nuestra calidad de vida y la seguridad de la que goza en la actualidad la ciudad de Mérida,-expresó.
