miércoles, 9 de noviembre de 2016

noviembre 09, 2016
CIUDAD DE MÉXICO / NUEVA YORK, 9 de noviembre de 2016.- Dana Bash, reportera de CNN, informó que la candidata demócrata Hillary Clinton se ha comunicado con Donald Trump para felicitarlo por su victoria en la elección presidencial. Con esta acción Clinton ha concedido la victoria al candidato republicano. Lo mismo informó NBC.

Se ha informado que la candidata demócrata a la presidencia no hablará el día de hoy.


Hillary ayer al ir saliendo los resultados de la votación, que desde el principio pintó mal para ella

El mismo presidente electo de EEUU, Donald Trump, confirmó la felicitación de su rival demócrata, Hillary Clinton, por la victoria en las elecciones presidenciales.

"Acaba de llamarme Hillary Clinton, nos felicitó por nuestra victoria y yo la felicité a ella y a su familia por esta campaña difícil, ella luchó como nunca", dijo. En su discurso de aceptación, Trump le dio las gracias y llamó a los estadounidenses a superar las "heridas de la división".

Las dudas de Trump en la campaña

Trump había expresado dudas el martes acerca de la integridad del sistema electoral estadounidense en el mismo momento que depositaba su boleta.

El hecho de no ser un político lo ha perjudicado y a la vez lo ha favorecido durante el último año.

Su falta de experiencia política le permitió presentarse como agente del cambio en momentos que los votantes de las dos tendencias parecen ávidos de un cambio. Fue un mensaje eficaz contra Clinton, una figura pública de gran presencia desde hace tres décadas.

Pero su falta de experiencia también dio lugar a una serie de controversias provocadas por él mismo, como un enfrentamiento de varios días con los padres de un soldado caído en combate o una lluvia nocturna de tuits sobre el “video sexual” de una reina de belleza. Insultó a sus oponentes de ambos partidos en términos personales y rebajó el discurso político a niveles inéditos en la escena nacional.

El republicano se mostró poco dispuesto a la tarea ardua y gris que caracteriza las campañas triunfantes.

Trump hizo poco para reunir información sobre sus posibles partidarios. Prácticamente no tuvo activistas en el terreno en estados cruciales y se negó a invertir en una campaña publicitaria a la altura de la de Clinton.

Como figura del espectáculo, basó su estrategia casi exclusivamente en actos masivos para presentarse ante los votantes. Llenó arenas deportivas, hangares de aeropuertos y centros de convenciones de Iowa a Michigan y Florida, a veces con escasa anticipación y organización.

Se jactó de que gastaría 100 millones de dólares de su propio dinero en la campaña, pero los informes públicos indican que llegó a 66 millones.

Durante su campaña declaraba: “Devolver la grandeza a Estados Unidos. Eso es todo. De eso se trata”. (lopezdoriga.com / EFE)