martes, 29 de noviembre de 2016

noviembre 29, 2016
CANBERRA, 29 de noviembre de 2016.- El calentamiento de los océanos este año ha provocado la peor cifra de corales muertos jamás registrada en la Gran Barrera de Coral de Australia, indicaron científicos el martes.

La zona más afectada es una franja de 700 kilómetros (400 millas) en el norte de la cadena de arrecifes, que se extiende dos mil 300 kilómetros (mil 400 millas) junto a la costa nordeste de Australia y está declarada Patrimonio de la Humanidad, indicó el Centro de Excelencia para Estudios del Arrecife de Coral, dependiente del Consejo de Investigación de Australia.

El centro, que tiene su sede en la Universidad James Cook en el estado de Queensland, determinó en análisis submarinos en octubre y noviembre que la franja norte de Port Douglas había perdido de media el 67 por ciento de sus corales de aguas poco profundas en los nueves meses anteriores.

Corales muertos en la Gran Barrera de Coral. (ARC Center of Excellence for Coral reef Studies)

Más al sur, en las vastas regiones central y sur que comprenden la mayor parte del arrecife, los científicos encontraron una tasa de muertes mucho menor.

La región central perdió un seis por ciento de coral y la zona sur sólo el uno por ciento.

"La mortalidad que hemos detectado a lo largo de la Gran Barrera de Coral es increíblemente dispar", indicó a la prensa el director del centro, Terry Hughes. "Hay daños muy graves en la zona norte del arrecife".

"Las buenas noticias son que al sur de Port Douglas, incluidas las principales zonas turísticas en torno a Cairns y las islas Whitsundays, han tenido niveles de mortalidad relativamente bajos", añadió.

Los gobiernos de Australia y Queensland informarán esta semana al Centro de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO sobre los progresos en la protección y mejora del arrecife, incluida su respuesta al blanqueamiento de corales, como se conoce el fenómeno de muerte de estas especies debido al aumento de temperatura del agua.

Proporcionar información actualizada al Comité de Patrimonio de la Humanidad fue una condición dentro de su decisión en junio del año pasado de no clasificar al arrecife como "en peligro".

El ministro federal de Medio Ambiente y Energía, Josh Frydenberg, dijo el martes que la cobertura del arrecife había aumentado un 19 por ciento en los últimos años antes de sufrir un "proceso significativo de blanqueamiento" este año, causado por el cambio climático y el fenómeno meteorológico de El Niño.

"Lo que demuestra es que la Gran Barrera de Coral es muy resiliente y bastante fuerte", indicó en un comunicado la oficina de Frydenberg.

El gobierno tiene previsto invertir dos mil millones de dólares australianos (1.500 millones de dólares australianos) en la próxima década para mejorar la salud del arrecife.

Es probable que la tasa de coral muerto en la zona norte haga mucho más difícil mantener al arrecife fuera de la lista de entornos en peligro, señaló Hughes.

"En su diálogo abierto con UNESCO, Australia ha dicho que los destacados valores universales del arrecife están intactos debido al prístino estado del arrecife norte. Sencillamente, ése ya no es el caso", dijo Hughes.

La cifra de pérdida de coral de 2016 fue "considerablemente peor" que la peor marca hasta la fecha, registrada en 1998, indicó el investigador Andrew Baird.

"La proporción de arrecifes que se vieron gravemente afectados fue mucho, mucho mayor", dijo Baird, añadiendo que no tenía cifras precisas disponibles en un primer momento.

El fenómeno de 1998 se restringió a arrecifes costeros en torno a la localidad de Townsville, en Queensland, mientras que la destrucción de 2016 afectó a una zona mucho mayor, explicó el experto.

Los científicos estiman que la región norte tardará de 10 a 15 años en recuperar los corales perdidos. Les preocupa que otro episodio de blanqueamiento pueda interrumpir esa recuperación.

En los últimos 18 años se han producido tres episodios masivos de blanqueamiento. En cada caso, las zonas más afectadas fueron las que tuvieron el agua más cálida durante un periodo de tiempo más largo.

El operador turístico en el arrecife Craig Stephen dijo que no esperaba que la muerte de corales empañara la experiencia de los visitantes de uno de los principales atractivos turísticos de Australia.

"La disparidad del blanqueamiento hace que podamos seguir proporcionando a nuestros clientes una experiencia de arrecifes de coral de primera clase llevándoles a los arrecifes que siguen en óptimas condiciones", indicó en un comunicado.

Graeme Kelleher, que dirigió durante 16 años la Autoridad del Parque Marino Gran Barrera de Coral, dijo la semana pasada que los australianos no deben aceptar la "mentira política" de que pueden mantener los arrecifes al mismo tiempo que grandes minas de carbón en la zona.

"Hemos perdido el 50 por ciento de la cobertura de coral de la Gran Barrera de Coral en los últimos 30 años y la principal causa de eso es la quema de combustibles fósiles. Espero sinceramente que la UNESCO rechace la afirmación de que el gobierno está haciendo suficiente", dijo Kelleher. (AP)