miércoles, 20 de abril de 2016

abril 20, 2016
WASHINGTON D.C., 20 de abril.- La Fuerza Aérea de Estados Unidos ha comenzado a usar sus corpulentos bombarderos B-52 contra el grupo Estado Islámico (EI, IS, ISIS, ISIL o Daesh) en Irak y Siria, pero la enorme aeronave sólo está llevando a cabo ataques de precisión, dijo este miércoles un portavoz militar

El B-52 Stratofortress —diseñado originalmente en la década del '50— se convirtió en un símbolo de los Estados Unidos durante la Guerra Fría. El avión fue utilizado, por ejemplo, para llevar a cabo bombardeos en Vietnam en los que murieron miles de civiles.

El coronel Steve Warren, portavoz de las fuerzas estadounidenses en Bagdad, dijo que un B-52 fue utilizado el lunes en una misión para destruir un centro de almacenamiento de armas en la ciudad iraquí de Qayara, 60 kilómetros al sur de Mosul.

Un bombardero B-52. (Reuters)

Warren señaló que el uso de los B-52 no implica un mayor riesgo de bajas civiles porque el avión solamente está armado con bombas guiadas.

"Hay recuerdos en el inconsciente colectivo de los B-52, hace décadas, haciendo (...) lo que podrían llamarse bombardeos indiscriminados", aceptó Warren.

"Esos días han quedado atrás. El B-52 es una plataforma de armas de ataque de precisión y se llevará a cabo el mismo tipo de ataques de precisión que hemos visto durante los últimos veinte meses," añadió.

Los B-52 están reemplazando a los bombarderos B-1 que fueron utilizados en la región durante el año pasado.

En octubre el Pentágono anunció la adjudicación a Northrop Grumman de un contrato que podría alcanzar los 80 mil millones de dólares para construir un nuevo tipo de bombardero que reemplazará al B-52 y al B-1.

El Pentágono difundió en febrero la primera imagen oficial de este bombardero del futuro, y lanzó asimismo un concurso interno en la Fuerza Aérea para denominarlo. Provisionalmente le fue adjudicado el nombre de B-21.

El bombardero será el sucesor del célebre y probado B-52 Stratofortress y del B-1 Lancer. Será capaz de penetrar furtivamente las cada vez más sofisticadas defensas antiaéreas de países como Rusia y China. (AFP)