viernes, 11 de marzo de 2016

marzo 11, 2016
WASHINGTON D.C., 11 de marzo.- El director de comunicaciones de Marco Rubio, Alex Conant, pidió hoy a los republicanos de Ohio que voten en las primarias del próximo martes por su gobernador, John Kasich, al ser el único que tiene posibilidades reales de frenar a Donald Trump en ese estado.

“Si eres un votante republicano en las primarias de Ohio y no quieres que Donald Trump sea el nominado, John Kasich es tu mejor apuesta”, llamó Conant en un mensaje emitido por la cadena CNN.

Del mismo modo, argumentó, los republicanos que quieran evitar que el multimillonario gane en Florida deben votar a Marco Rubio, “el único con una oportunidad matemática” de vencerle.

Preguntado por estos comentarios en una rueda de prensa posterior, Rubio reconoció que “claramente” Kasich tiene más posibilidades de ganar Ohio que él.

"Si eres un votante republicano en las primarias de Ohio y no quieres que Donald Trump sea el nominado, John Kasich es tu mejor apuesta", dijo el director de Comunicaciones de la campaña de Rubio, Alex Conant, en un mensaje emitido por la cadena CNN.

“Si los votantes de Ohio concluyen que la mejor manera de frenar a Trump es votar por Kasich, supongo que esa es la decisión que tomarán”, dijo el senador a los periodistas en West Palm Beach (Florida).

Cuando le insistieron sobre si él pide a sus seguidores que voten por el gobernador en Ohio, Rubio se limitó a decir: “Dejo a John que sea él quien haga esa argumentación”.

La campaña de Kasich no devolvió el favor a la de Rubio. Uno de sus portavoces, Trent Duffy, rechazó pedir en Florida el apoyo al senador porque a los votantes “no les gusta que les digan lo que tienen que hacer” y “el gobernador es el mejor para cualquier estado”.

La idea de la campaña de Rubio provocó la sorna de otro de sus rivales, el senador Ted Cruz, que consideró el movimiento “el último suspiro del ´establishment´ de Washington”.

“(Dicen) dividamos las cosas, juguemos juegos. Esto es realmente simple. ¿Cómo se le gana a Trump? Ganándole”, consideró el legislador por Texas en una entrevista con la cadena Fox.

En la cuerda floja Rubio y Kasich

Tanto Rubio como Kasich se juegan su continuidad en la carrera por la Casa Blanca en las primarias del próximo martes, en las que sus estados otorgan al ganador 99 y 66 delegados, respectivamente, sin el reparto proporcional habitual en las anteriores votaciones.

Según las encuestas, Kasich tiene más posibilidades de vencer a Trump en Ohio que Rubio en Florida.

El magnate solo le aventaja con una media de 2.5 puntos porcentuales y algunos sondeos han dado por vencedor al gobernador, según las estadísticas de Real Clear Politics.

En Florida, todos los sondeos efectuados hasta la fecha dan por ganador a Trump, con una media de 14.7 puntos porcentuales de ventaja sobre Rubio, que asegura estar recortando la distancia a solo un dígito, como indicó una encuesta reciente.

El súper PAC (grupo de acción política) Conservative Solutions, que apoya a Rubio, ha pagado más de $1 millón en anuncios televisivos y de Internet contra Kasich en Florida para conseguir que el alrededor del 8% de apoyo que tiene en el estado ayude al senador a vencer a Trump.

Los que no quieren que Trump sea el nominado republicano son conscientes de que dos derrotas en Florida y Ohio serían claves para frenar su camino a la nominación, que ahora lidera con 459 delegados, frente a los 360 de Ted Cruz, los 152 de Rubio y los 54 de Kasich.

La otra cara de la moneda es que si Rubio y Kasich vencen en sus estados, seguirán con toda probabilidad en la carrera por la Casa Blanca y Trump seguirá beneficiándose de que el voto en su contra se divide entre tres.

Cruz ha llamado al partido a que se una en torno a él para frenar a Trump, pero ese paso es difícil para el aparato republicano ya que el senador por Texas ha labrado su carrera política criticando al “establishment” y aupado al calor del movimiento ultraconservador “Tea Party”.

Un escenario que se baraja para frenar a Trump es evitar que consiga los 1,237 delegados para asegurar la nominación con el voto popular y elegir al nominado en una Convención Nacional disputada, en la que podría imponerse incluso un candidato que no haya participado en las primarias. (EFE)