Malcolm Nance* / Politico Magazine
Los ataques terroristas del martes en Bruselas, Bélgica, nos recuerdan que el Estado islámico (EI, IS, ISIS, ISIL o Daesh) es un enemigo resistente y adaptable. Sus combatientes pueden operar en entornos de alta seguridad y mantenerse un paso por delante de las fuerzas antiterroristas al buscar castigar Europa, y por extensión los Estados Unidos, por las operaciones contra su "califato".
Por supuesto, Europa, los EE.UU. y muchos de sus aliados han estado respondiendo: casi 23,000 ataques aéreos exitosos lanzados por los EE.UU. y sus aliados desde 2014 han diezmado las filas de ISIS hasta el punto de que la banda terrorista ha reducido los salarios, las raciones de comida (a la mitad) y ordenan a los niños a pelear en el campo de batalla. Pero también hay tácticas más asimétricas que los EE.UU., la OTAN y sus aliados regionales utilizan en su lucha contra el grupo terrorista. Aquí hay cinco maneras de devastar a ISIS en este momento.
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| Soldados del Ejército sirio quemando una bandera del Estado Islámico hoy, al terminar de liberar la ciudad de Palmira. |
1. Use las palabras correctas
ISIS no es "Islam radical". Hamas, Hezbollah, Fatah, la Hermandad Musulmana -estos son los grupos radicales islámicos. Recurren a la lucha armada y al terrorismo para avanzar hacia sus objetivos. Pero también son organizaciones políticas que tienen reglas internas, normas y códigos de conducta. Hamas y Hezbolá operan dentro de las normas geopolíticas. Se puede negociar y razonar con ellos.
El ISIS es un animal completamente diferente, un culto religioso de magnitud más extrema que incluso los grupos islámicos más extremistas del pasado. El ISIS rinde culto en el altar a la yihad apocalíptica perpetua que afirma que cada acto de asesinato en masa, violación o terrorismo suicida contra sus enemigos es una forma de culto igual a la oración. La participación en la yihad hasta que la muerte se considera una obligación religiosa más grande que la profesión de fe, la caridad, el ayuno, la oración y la peregrinación (Hajj), los cinco pilares del Islam. Sí, ISIS es un ejército insurgente basado en el terror que busca establecer un califato, pero el objetivo final real del grupo está lejos de ser político: ISIS cree que a través de la yihad hará llegar el día del juicio. Este no es el verdadero Islam. Es una variante corrupto que hace caso omiso de siglos abrazo incrementales de la religión de la tolerancia, el respeto, la educación y el arte, y en su lugar con pasión abraza a una interpretación errónea del Corán: uno que dice que la violación, la destrucción y el abuso infantil son las más altas formas de culto .
Referirse al ISIS como un grupo religioso destructivo en lugar de un grupo legítimo teo-político "radical islámico" no es sólo más preciso, sino que también expone el imaginario religioso corrupto de ISIS. Permitirá que el mundo musulmán rechace al grupo sin rechazar su fe, y podría hacer que los musulmanes que militan o respaldan al ISIS se pregunten si sus almas están en riesgo por cooperar.
2. Deje de culpar al Islam. Ataque el culto
El mundo musulmán es el único baluarte contra el ISIS. No vamos a derrotar al ISIS tuiteando desde el Departamento de Estado; los derrotaremos encabezando la voz colectiva de la población musulmana mundial. Si los musulmanes de todo el mundo niegan la legitimidad del ISIS y colaboran con los EE.UU. y sus aliados para erradicar a los posibles terroristas en sus comunidades, la influencia del grupo va a decaer dramáticamente.
Para ello se requiere el reconocimiento de que los que están en el mundo islámico no son el problema o la amenaza, sino que son las víctimas de ISIS. Ellos son los aliados que estamos luchando para defender.
Y mientras la retórica política desagradable contra los musulmanes no se detenga, ISIS va ganando. Tanto el ISIS como Al Qaeda quieren demostrar a los musulmanes que Estados Unidos es su mayor enemigo. No le demos esta herramienta al enemigo. Nuestros valores se basan en la tolerancia y el respeto, y si aprendemos a proporcionar un mínimo de esos valores a los 1.6 mil millones de musulmanes en el mundo y apoyamos sus esfuerzos para rechazar este culto directamente, ISIS podrá ser "triturado en las sombras", como temía el Dr. Ayman al-Zawahiri, el nuevo líder de al Qaeda.
3. Dar rienda suelta a las operaciones especiales
En este momento, cuando se trata de luchar contra ISIS, las fuerzas especiales de Estados Unidos son en su mayoría desplegadas para reunir información de inteligencia, rescatar rehenes y capturar a los terroristas de alto valor. Se pueden utilizar más eficazmente.
El "califato" del ISIS es realmente una serie de "islas" (ciudades y aldeas) conectadas por carreteras y líneas de suministro. Si se cortan estas líneas, la imagen de una masa cohesiva desaparece y se ven bolsones de zonas pobladas. El Pentágono acaba de identificar la región "más gruesa" o más densa de la potencia de combate de ISIS en Irak como el corredor vial entre Mosul y la frontera con Siria. ¿Cómo podemos destruir esto? Ordenando a fuerzas iraquíes y kurdas entrenadas, junto con las fuerzas especiales de Estados Unidos, llevar a cabo ataques con poderoso armamento a lo largo de las carreteras del grupo. Estas unidades indígenas de 100 hombres, cada una con 25 asesores estadounidenses y respaldadas por ataques aéreos tácticos, emboscarían a los milicianos de ISIS durante un período de 24 a 96 horas, y cambiarían el equilibrio de poder de inmediato.
Lanzados en paracaídas desde helicópteros o por Boeings C-17 Globemaster III, las unidades de tierra no sólo cortarán las líneas de suministro, sino provocarán deliberadamente peleas con grandes concentraciones de terroristas, creando bolsas de caos que un ISIS desorganizado tendrá que confrontar. Después de que los combatientes del ISIS salgan de sus túneles, ataques aéreos selectivos los diezmarán a ellos y todos sus vehículos, tanques, infantería o camiones de asalto para atentados suicidas. Atacar múltiples lugares a cientos de millas de distancia en días diferentes, combinado con bombardeos aire-tierra, destruiría la logística de ISIS.
4. Lanzamiento de la guerra cibernética a gran escala
En este momento, la Agencia de Seguridad Nacional es reacia a atacar directamente a las fuentes de inteligencia primaria valiosa, tales como servidores de computadoras enemigas o comunicaciones. Ellos deben reconsiderar esa política en el ciberespacio. ISIS opera en la web oscura, las partes ocultas más profundas de la red global de Internet a través de sus partidarios. Esta red puede ser deshecha si se pone en marcha un esfuerzo concertado para romper la constelación de servidores reales que mantienen estas operaciones ocultas en línea. De la misma manera que el virus Stuxnet se dirigió a las computadoras iraníes que apoyaban el programa nuclear de Irán, debería actuar el Comando Cibernético de EE. UU. para identificar y derribar las conexiones informáticas que enlazan los medios de comunicación y a los fans de la red en todo el mundo.
Una vez que el Comando Cibernético ataque por vía electrónica y tome el control de los servidores, a continuación podrá diseminar la contrapropaganda en esas mismas redes. Imagínese si al abrir cada página web de ISIS en el mundo al instante se cubra con las palabras "Usted es el enemigo número 1 del Islam. Ríndase."
El Proyecto Asymmetric Project, en el que trabajo, ha estado explorando y atacando a la "Red Oscura" de ISIS durante más de un año, con cierto éxito, pero esto es un trabajo para el Comando cibernético de Estados Unidos, que todavía no ha puesto en marcha una campaña cibernética global contra el grupo terrorista.
5. Prepárese para los juicios por crímenes de guerra en el mar
La Cámara de Representantes de EE.UU. y el secretario de Estado John Kerry declararon esta semana que ISIS está cometiendo un genocidio contra los cristianos y yazidíes en el Medio Oriente. Los combatientes de ISIS también han cometido crímenes de guerra contra los musulmanes, tanto chiítas como sunitas. La comunidad internacional debe poner en marcha una respuesta agresiva.
Muchos combatientes del ISIS, una vez capturados, son enviados a sus países de origen para que sean juzgados o encarcelados en prisiones destartalados donde las posibilidades de escapar son bastante buenas. En vez de continuar esta práctica, la comunidad internacional, con los EE.UU. a la cabeza, debería enviar combatientes capturados de ISIS de alto valor a buques-prisión y proceder a juicio sumario con pruebas inmediatas, sin consideraciones sin sentido. Estos buques podrán estar situados cerca de Diego García, el protectorado británico en la parte más profunda del océano Índico. Fiscales, abogados defensores y testigos podrían conferenciar por vídeo. Los barcos podrían estar equipados para aplicar la pena capital a bordo. Si la sentencia fuera de prisión, el terrorista sería transportado a una cárcel occidental con la seguridad y las garantías adecuadas.
Barcos modernos como prisiones a gran escala tendrían que ser construidos y contratados, pero serían mucho menos costosos que el mantenimiento de la bahía de Guantánamo y muy difíciles de localizar o escapar de ellos. Por no hablar de que a partir de los juicios internacionales de crímenes de guerra cambiaría inmediatamente la imagen global de ISIS como ejército expedicionario victorioso a una banda de criminales de guerra perseguidos.
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* Malcolm Nance es director ejecutivo del Proyecto Terror Asymmetrics y fue oficial de contraterrorismo en el Oriente Medio durante más de 35 años. Es autor del libro Defeating ISIS: Who they are. How they fight. What they believe.
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Traducción Libertad de Expresión Yucatán
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Traducción Libertad de Expresión Yucatán
