jueves, 24 de marzo de 2016

marzo 24, 2016
BRUSELAS, Bélgica, 24 de marzo.- El primer ministro belga, Charles Michel, prometió este jueves que su "gobierno y las autoridades competentes harán absolutamente todo para esclarecer los atentados" del martes en Bruselas.

"No habrá impunidad (...) no puede haber zonas grises", insistió en un discurso solemne en el Parlamento al tercer día de duelo nacional en Bélgica.

Al término de su alocución, frente a los reyes Felipe y Matilde, el conjunto de su gobierno, el Parlamento federal y los presidentes de los parlamentos regionales, se observó un minuto de silencio.

Poco antes, los ministros de Interior y de Justicia, Jan Jambon y Koen Geens, presentaron su dimisión a Michel, que las rechazó, por "errores" vinculados al seguimiento de uno de los atacantes suicidas de los atentados de Bruselas, indicó la prensa belga.

Koen Geens, Charles Michel y Jan Jambon © Belga 

"Confirmo que presenté mi renuncia", declaró el ministro de Interior, Jan Jambon, citado por el periódico Le Soir. El ministro de Justicia, Koen "Geens también. Fueron rechazadas", agregó, señalando que hubo "errores de la Justicia y de un oficial de enlace (belga) en Turquía".

Ankara afirmó el miércoles que uno de los atacantes suicidas del aeropuerto de Bruselas, el belga Ibrahim El Bakraoui, había sido detenido en junio de 2015 en Turquía cerca de la frontera con Siria y expulsado en julio hacia Bélgica vía Holanda por ser un "combatiente yihadista".


"Si bien les informamos de que este individuo era un combatiente terrorista, las autoridades belgas no lograron identificar sus vínculos con el terrorismo", lamentó Erdogan.

El miércoles por la noche Geens señaló en declaraciones a un canal de televisión flamenco que "no tenía antecedentes por terrorismo. Era un criminal de derecho común en libertad condicional".

"Cuando fue expulsado lo habría sido, según la información que me comunicó la fiscalía federal, hacia Holanda y no hacia Bélgica", agregó.

Según informó este jueves el periódico De Standaard, los servicios de seguridad belgas no tuvieron contacto con El Bakraoui luego de su llegada al aeropuerto de Ámsterdam-Schiphol.

Un mes después de su regreso a Schiphol, la justicia constató que no respetaba más las condiciones de su libertad condicional, añade el periódico, por lo que la justicia emitió una orden de arresto en agosto, según el canal VRT.

El ministro de Justicia aseguró que las autoridades belgas fueron informadas del arresto de este ciudadano belga en Turquía en junio cerca de la frontera con Siria, pero luego no lo fueron cuando Ankara lo expulsó el 14 de julio en avión hacia Holanda.

Koen Geens afirmó que sólo los informaron de la expulsión "cuando el avión ya había aterrizado en Schiphol (Ámsterdam), haciendo su arresto muy complicado", sin precisar si la falta de comunicación se debía al oficial de enlace o a los turcos.

Ibrahim El Bakraoui, condenado en 2010 a nueve años de prisión por haber disparado a oficiales de policía luego de un robo, fue liberado en 2014 bajo control judicial.

Jambon, Geens y su colega de Asuntos Exteriores, Didier Reynders, declararán ante una comisión parlamentaria para explicar este error. (AFP / Le Soir)