domingo, 20 de marzo de 2016

marzo 20, 2016
MÉRIDA, Yucatán, 20 de marzo.- La Feria Internacional de la Lectura Yucatán (FILEY) fue sede, en el marco de su última jornada, de la presentación del libro Cuentos de todos, de Armando Fuentes Aguirre "Catón".

"Catón" en la FILEY (foto: José Repetto)

Durante la presentación, que llenó a tope el salón donde se llevó a cabo, el autor comentó que el libro contiene vivencias y trozos de su vida.

Citó a San Agustín, quien dijo "Ama y haz lo que quieras" porque quien ama no puede hacer el mal.

"Este libro está hecho con ese amor a los demás y este libro quiere que su fruto sea eso, el amor", dijo.

"Hay historias lo mismo para reír que para reflexionar. La vida está hecha de muy diversos materiales, algunos son de sustancia dolorosa", expresó.

"Catón" reflexionó que a veces cuando sufrimos, nos hacemos la insana pregunta de "¿por qué a mí?", preguntando en su lugar por qué no compartir con nuestros semejantes la parte de dolor humano que nos toca.

Fuentes Aguirre resaltó la manera en la cual los mexicanos enfrentan la tragedia, indicando que el humor no es para nosotros una manera de evasión, no es para evitar la pena, sino para plantarle frente a la vida.

"Los mexicanos no reímos de, reímos con", dijo.

El escritor rechazó el miedo a la muerte, indicando que nos lo quisieron imponer "hombres perversos".

"Seguramente, aunque no lo sepamos, es nueva vida y esa esperanza nos debe dar paz interior", expresó.

"Catón" comentó que hay quienes escriben para otros escritores y otros para sí mismos.

"Yo escribo para mis cuatro lectores, es decir para ustedes", dijo.

Elogió a la Filey por destacar la lectura en su nombre, ya que "el libro solo es un objeto inerte, es como una piedra, está muerto".

El invitado también habló sobre el impacto de los teléfonos móviles, indicando que acercan a quienes están lejos y alejan a quienes están cerca.

El autor también recordó la anécdota sobre cómo conoció a su esposa, sentada en primera fila, con quien el pasado diciembre celebró 51 años de matrimonio.

"Ahora díganme si no parezco su abuelito", bromeó.

Tras agradecer al amor, a su casa editorial, a su esposa y a su público, dijo: "Cuando me porto bien, Dios me da el regalo de mandarme a Mérida", y elogió la música yucateca y la lengua maya, llamando a mantenerla viva.

Tras la presentación, el autor firmó autógrafos de su obra para los asistentes. (José Repetto)