jueves, 7 de enero de 2016

enero 07, 2016
SEÚL, Corea del Sur, 7 de enero.- Tras el anuncio de Corea del Norte de que había realizado una prueba con una bomba de hidrógeno el miércoles, hubo concurridas protestas en esta capital, donde se quemaron fotografías del líder norcoreano, Kim Jong-un.

Corea del Sur limitó el acceso a un parque industrial en Corea del Norte que gestionan los dos países, en su primera acción concreta después de que Pyongyang anunciara que había probado con éxito una bomba de hidrógeno.

Se prohibirá la entrada a los visitantes que no tengan relación directa con las empresas que operan en el parque industrial Kaseong, indicó el Ministerio de Unificación. Esto afecta a clientes, posibles compradores y proveedores de servicios de 120 negocios surcoreanos en la ciudad fronteriza norcoreana.

Las protestas en la capital de Corea del Sur contra el dictador de Corea del Norte y su última provocación: presumir de que detonó una bomba dce hidrógeno. Cientos de surcoreanos salieron a las calles con pancartas que decían: "Kim Jong-un, lárgate, basta". Efigies del líder han sido quemadas junto con las banderas del país asiático. (Reuters)

Las empresas surcoreanas del parque —en su mayoría pequeñas y medianas— fabrican objetos como relojes y artículos de moda con mano de obra barata norcoreana. El recinto, donde trabajan unos 53.000 norcoreanos, es el último proyecto importante gestionado por ambos países heredado de una era de acercamiento.

Estados Unidos hizo varios vuelos con aviones de reconocimiento desde una base estadounidense en el sur de Japón, un día después de que Corea del Norte dijera haber probado una bomba de hidrógeno.

Al menos tres aviones salieron el jueves de la base de Kadena, en la isla japonesa de Okinawa.

No estaba claro cuál era la misión de las naves, pero podrían participar en los esfuerzos por determinar qué clase de dispositivo detonó Corea del Norte.

Uno de los aviones a los que se vio salir, el RC-135S, recoge datos ópticos y electrónicos de objetivos balísticos. Se utiliza para verificar el cumplimiento de acuerdos sobre armas y en el desarrollo estratégico y de defensa de misiles de Estados Unidos.

El portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest dijo el miércoles a la prensa en Washington que "Estados Unidos reunirá pruebas adicionales" y trabajará de cerca con otros países en la región para saber más sobre la prueba norcoreana.


 Corea del Sur dice que responderá al ensayo nuclear de Corea del Norte retomando la emisión de propaganda transfronteriza, considerada un acto de guerra por Pyongyang.

La oficina de la presidenta en Seúl dio a conocer la medida el jueves, un día después de que Pyongyang anunció su primera prueba con una bomba de hidrógeno. Gobiernos y expertos extranjeros ponen en duda esta afirmación.

El Sur detuvo sus emisiones propagandísticas anteriores a finales de agosto tras acordar con Pyongyang un paquete de medidas destinadas a rebajar las hostilidades entre los dos vecinos, cuando se consideraban varias medidas sancionadoras.

Seúl explicó que las emisiones comenzarán el viernes.

 Manifestantes tomaron las calles de Seúl para protestar contra el supuesto ensayo nuclear realizado por Corea del Norte.

Unas 150 personas de un grupo cívico conservador se reunieron cerca de la plaza Gwanghwamun e instaron al gobierno surcoreano a tomar medidas severas contra su vecino del norte.

Durante la protesta, quemaron una efigie del líder norcoreano, Kim Jong Un, y rompieron una bandera del país.

Corea del Norte anunció el miércoles su primera prueba con una bomba de hidrógeno, generando una amplia condena y escepticismo a nivel nacional. (AP / Antonio Villarreal / El Español)