CIUDAD DE MÉXICO, 20 de noviembre.- Otra vez. Muchos ya se las olían. Los optimistas esperaban un excelente concierto para compensar la cancelación de la noche anterior y los demás, minutos antes de las nueve de la noche lanzaban bromas en voz alta como “van a decir que se va a cancelar otra vez” que finalmente, se cumplieron como sentencia, pues "El Sol" salió a alumbrar el Auditorio Nacional solamente por quince minutos para después extinguirse definitivamente entre gritos, insultos y abucheos.
El declive del concierto se dejó ver desde el principio, cuando con evidentes problemas en la voz entonó la primera canción “Qué nivel de mujer”, "¿Sí está cantando él?", preguntó una asistente a sus acompañantes.
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| Por segunda noche consecutiva, defraudó a los 10 mil seguidores que abarrotaron el recinto de Paseo de la Reforma. |
Al terminar entre gritos y aplausos de emoción se apagaron por completo todas las luces, lo que dejó a todos atónitos por unos segundos -para ver si entonaba el siguiente tema- pero al ver extenderse esta pausa comenzaron los gritos y chiflidos “¡Ya va a cancelar!”, gritó alguien, pero no, aún faltaban dos canciones.
Después de dos minutos, las luces se prendieron de nuevo y era, para los amantes de su música, como si nada de tiempo hubiera pasado, pues se levantaron de sus asientos, gritaron, cantaron y se dejaron deslumbrar por "El Sol" en la segunda canción de la noche “Tú sólo tú”, donde su voz se escuchaba mucho mejor que en la primera canción.
Ahi, Luis Miguel se movió, bailó, pasó el micrófono al público para que lo ayudaran a entonar esta canción, gritó “¡México!”, y al terminar este tema, otra vez, absoluta oscuridad y una larga pausa que acabó tras otros casi dos minutos con “Suave”, sin embargo la molestia seguía siendo evidente, pues movía las manos a la altura del cuello constantemente en ademán de molestia.
Al terminar, sin decir palabra, sin decir adiós o hacer una señal, "El Sol" se apagó definitivamente y pasaron uno, dos minutos y entre gritos de descontento y de “¡otra, otra, otra!” Se oyó cómo alguien preparaba un micrófono para dar finalmente el anuncio de las malas noticias que se confirmaron cuando la luz se fue encendiendo gradualmente.
“Por causas de fuerza mayor y la salud del artista, el concierto será pospuesto nuevamente, Luis Miguel ha querido venir aquí con todos ustedes haciendo un esfuerzo muy grande pero su garganta y su salud no se lo permite”, dijo una voz masculina al recinto ensordecido por abucheos y por gente que desde que se encendieron las luces tomó sus cosas y salió con el rostro enfurecido.
Más adelante la misma voz explicó que la causa de la cancelación era un cuadro de laringitis y pese a que momentos antes expresaban que buscarían reprogramar la fecha, concluyeron.
“El concierto del día de hoy se da por cancelado, el reembolso se va a efectuar en el punto de venta donde adquirieron sus boletos a partir de 48 horas hábiles, el Auditorio Nacional lamenta esta situación”. Tras estas palabras muchos aún dentro externaron su molestia, alguien gritó “¡Borracho!” Y no faltaron los que le lanzaron un “¡Puto!”. (Juan Mérida / El Universal / Excélsior)
