viernes, 20 de noviembre de 2015

noviembre 20, 2015
NUEVA YORK, 20 de noviembre.- El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado este viernes por unanimidad una resolución impulsada por Francia que autoriza “todas las medidas necesarias” para combatir al autodenominado Estado Islámico (EI, IS, ISIS o Daesh) y los grupos vinculados a Al-Qaeda. Los atentados perpetrados en París hace una semana, en los que murieron 129 personas, han marcado un punto de inflexión en la estrategia internacional y ha alumbrado el primer texto que el Consejo aprobado específicamente contra este grupo terrorista. Aunque no invoca el capítulo 7, que es el que daría base legal para el uso de la fuerza, la diplomacia francesa valora el apoyo político que supone para su campaña de respuesta al yihadismo.

El Consejo de Seguridad califica a Daesh como una amenaza mundial y sin precedente contra la paz y la seguridad internacionales.

El texto votado:

“Condena en sus términos más fuertes los abusos continuos, extendidos y sistemáticos de los derechos humanos y las leyes humanitarias, así como los actos bárbaros de destrucción y saqueo del legado cultural llevado a cabo por el ISIS [el Estado Islámico], también conocido como Daesh”.
 
“Llama a los Estados miembros que tienen capacidad a tomar todas las medidas necesarias, en cumplimiento con la legislación internacional, en particular con la humanitaria y de refugiados, en los territorios bajo el control de ISIS, en Siria e Irak, a redoblar y coordinar sus esfuerzos para prevenir y aplacar los actos terroristas cometidos específicamente por [el] ISIS, también conocido como Daesh, así como el Frente Al Nusra y todos los individuos, grupos y entidades asociadas a Al Qaeda y otros grupos terroristas, como [los] designa el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”.

La resolución se debatió en un día marcado por el secuestro yihadista en Mali y salió adelante incluso con el apoyo incluso de Rusia, que ha puesto muchas pegas a otras medidas sobre Siria debatidas en el Consejo de Seguridad. Sí había apoyado resoluciones relacionadas con el uso de armas químicas o de carácter humanitario.

En el texto, los países se comprometen a tomar “todas las medidas necesarias” en cumplimiento con las leyes internacionales y las zonas controladas por los terroristas en Siria e Irak, para “redoblar y coordinar sus esfuerzos para prevenir y sofocar actos terroristas cometidos específicamente por el ISIS, también conocidos como Daesh y ANF, y otros grupos, individuos y entidades asociados a Al Qaeda y por otros grupos terroristas”.

Antes de la votación, el embajador francés ante la ONU, François Delattre, dijo a los medios de comunicación que la situación de “excepcional” amenaza que el grupo terrorista supone para la comunidad internacional requiere “una respuesta clara, unidad y sin ambigüedades del Consejo de Seguridad”. “Este es el objetivo de nuestro borrador de resolución”, añadió Delattre.

Rusia había impulsado una resolución paralela que, según AFP, promovía luchar contra el ISIS con el consentimiento de Siria, pero esa constituye la gran discrepancia internacional en cuanto a la estrategia en el país, ya que Estados como Francia, Reino Unido y Estados Unidos rechazan cualquier colaboración con el régimen de Bachar el Asad. En medio de estas divergencias, Rusia y China, miembros permanentes del Consejo de Seguridad y por tanto con derecho de veto, han bloqueado otras resoluciones.

Los atentados en París han cambiado el escenario. Tras el atentado, Francia y Rusia bombardearon con escaso margen de horas Raqa, un feudo yihadista en Siria, y acordaron ampliar la coordinación con más países, sobre todo EE UU.

De momento, Francia también ha pedido ya la ayuda militar en el ámbito de la UE. Tras los ataques, el Gobierno apeló al artículo 42.7 de los tratados europeos, que supone una cláusula defensa colectiva por la cual “si un Estado miembro es objeto de una agresión armada en su territorio, los demás Estados miembros tendrán la obligación de prestarle ayuda y asistencia con todos los medios a su alcance, de conformidad con el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas”.

La resolución de este viernes describe a los yihadistas del ISIS como una “amenaza sin precedentes para la paz internacional y la seguridad” y expresa su intención de actualizar “rápidamente" la lista de sanciones con el fin de "reflejar mejor la amenaza” de Daesh. El texto también condena de forma “inequívoca” los ataques en Turquía, Beirut o París y refirma que todas las medidas tomadas para combatir el terrorismo respetan la legalidad internacional, humanitaria y de los refugiados. (Amanda Mars / El País / lapresse.ca)