martes, 20 de octubre de 2015

octubre 20, 2015
ROMA, Italia, 20 de octubre.- El Papa Francisco tendría una "pequeña mancha oscura en el cerebro", un pequeño "tumor curable." Lo publica el diario italiano Quotidiano Nazionale (QN) en su primera página, hablando de una visita de incógnito hecha por Jorge Mario Bergoglio hace algún tiempo a un pequeño pueblo de la Toscana, con el fin de consultar a un médico japonés, especialista de renombre mundial en este tipo de enfermedades. No obstante, el facultativo le habría asegurado: no hay necesidad de una intervención.


La Oficina de Prensa de la Santa Sede, ya en la noche de hoy, el portavoz del Vaticano, el padre Federico Lombardi, ha negado rotundamente la publicación: "El Papa está llevando a cabo sus actividades intensísimas, como siempre. La difusión de noticias infundadas es extremadamente irresponsable y no es digna de atención". Sin embargo, el desmentido ha hecho que el director de QN, Andrea Cangini, replique de inmediato: "La negación es comprensible y  esperada. Hemos mantenido durante mucho tiempo la noticia sin publicar para antes hacer todas las comprobaciones necesarias. No tenemos ni la más mínima duda en que está fundada. Nos hemos cuestionado seriamente si debíamos publicarla o no. Creemos que lo publicable sobre un jefe de Estado o de gobierno también se aplica al Papa: la enorme responsabilidad pública que estas personalidades tienens nos lleva a creer que el derecho a la privacidad es menos importante que el derecho del público a ser informado".

La visita de Jorge Bergoglio habría tenido lugar hace unos meses en la clínica San Rossore de Barbaricina, cerca de Pisa, donde el helicóptero papal fue visto aterrizar. El Papa, escribe QN, fue examinado por el profesor Takanori Fukushima, experto en tumores cerebrales y aneurismas. El informe final, sin embargo, elimina toda duda para QN: "Usted no necesita ningún tipo de intervención. Esa mancha -dice el periódico, reportando como fuente las palabras de un miembro del personal de la clínica-, el pequeño tumor, es curable". El diario, al lado de la noticia en la primera plana publicó un editorial firmado por el director, Cangini, con el título: "El deber de escribirlo". Fukushima es profesor de neurocirugía en los Centros Médicos de la Universidad de Duke y de la de Virginia Occidental.

La noticia llega en vísperas de días muy delicados para el Vaticano. El sábado por la tarde culmina el Sínodo sobre la Familia, del que se esperan decisiones importantes sobre asuntos de gran trascendencia para los fieles, como el voto de los Padres sinodales sobre si los divorciados vueltos a casar podrán comulgar o no, cuestión que divide a teólogos conservadores y reformistas. (MARCO ANSALDO / La Repubblica)