miércoles, 16 de septiembre de 2015

septiembre 16, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 15 de septiembre.- A 205 años del inicio del movimiento de Independencia de México, no se puede ignorar que todavía prevalecen muchas de las causas que motivaron esa gesta, advirtió el alcalde Mauricio Vila Dosal durante su intervención en la Sesión Solemne de Cabildo para conmemorar esa efeméride.

—No podemos ignorar que aún existen dolores evitables, como la pobreza extrema, la falta de oportunidades, la carencia de una educación que permita, como decía el generalísimo Morelos y Pavón en Los Sentimientos de la Nación: "Que se eduque al hijo del labrador y del barrendero como al del más rico hacendado". Ya Morelos advertía que el presupuesto básico de la democracia es la equidad —subrayó.

Asimismo, el concejal se refirió al difícil entorno macroeconómico actual que compromete a todos a encabezar un gobierno municipal más efectivo y más eficiente.

—Y no me cabe la menor duda que la mejor forma de honrar a los hombres y mujeres que forjaron la Independencia de esta gran Nación, que hoy es conocida en todo el mundo como México, es luchando para que, desde el ámbito de nuestras responsabilidades demos a los ciudadanos de Mérida mejores condiciones de vida, y contribuyamos a aliviar las desigualdades que aún laceran a nuestra sociedad —recalcó.

Entonación del Himno Nacional en la Sesión Solemne de Cabildo

La Sesión Solemne se realizó a partir de las 20 horas en el auditorio Silvio Zavala Vallado, designado sede oficial provisional del Cabildo. La oradora huésped fue la Licenciada en Ciencias de la Comunicación, María Teresa Lavinia Mézquita Méndez. Asistieron como invitados especiales Roberto Rodríguez Asaf, secretario general de Gobierno, en representación del gobernador, Rolando Zapata Bello; y los representantes de los poderes Legislativo y Judicial.

Entre los presentes estaba la esposa del alcalde, María Eugenia Ortiz Abraham. También estuvieron presentes los ex alcaldes Xavier Abreu Sierra, Manuel Fuentes Alcocer, Luis Correa Mena, César Bojórquez Zapata y Renán Barrera Concha.

Mauricio Vila destacó que el inicio de la lucha por la Independencia de México es más que el simple festejo de una fecha.

La secretaria municipal María Fritz Sierra, el diputado Antonio Homá Serrano, el Alcalde Mauricio Vila Dosal y el secretario general de Gobierno, Roberto Rodríguez Asaf.

—Es la oportunidad de reflexionar acerca de los motivos que impulsaron a los hombres y a las mujeres de esa época a emprender la gesta heroica —manifestó—. Es recordar a los hombres y a las mujeres que ofrendaron sus vidas en aras de un ideal de libertad y de justicia. Es hablar de aquellos hombres y mujeres que lucharon por forjar un México donde los derechos de  todos sean respetados, donde las leyes estén por encima de intereses particulares.

 Añadió que al celebrar esta noche el inicio de la vida independiente como Nación, es el momento en que el pueblo mexicano decidió estar unido no sólo por el pasado, por sus costumbres, por sus tradiciones y también por un futuro definido y construido en común.

—Por eso se dice que un Pueblo es una comunidad de recuerdos, en tanto que una Nación es ese mismo Pueblo cuando decide ser, además, una comunidad de destino —subrayó—.

Aplauden a la oradora invitada, María Teresa Lavinia Mézquita (intervención en notas aparte: 
Meridanos, logremos la más pura e ideal de las independencias: la del pensamiento y Llama Teté Mézquita a reconocer inserción de Mérida en la Patria Mexicana) los regidores panistas Arturo Sabido Góngora, Leonardo Parra Canto, Rosa Ceballos Madera, José Luis Martínez Semerena, Mauricio Díaz Montalvo, Dafne López Osorio, Víctor Merari Sánchez Roca y María Fritz Sierra.

Eso somos los mexicanos: un pueblo con tradiciones, costumbres, historia, valores, que juntos aspiramos a tener, a partir y con la riqueza de nuestro pasado, un futuro mejor para nosotros y para nuestras familias. Por eso somos una gran Nación.

Advirtió que el problema de la independencia de los pueblos es, hoy, el de la interdependencia de los pueblos, ya que en la era de la globalización tienden a borrarse las fronteras, por lo que el reto de México, de Yucatán y de Mérida es ser distintos y distinguibles.

Hizo notar que la celebración del 205 Aniversario del inicio la Independencia coincide con el comienzo de un nuevo gobierno municipal.

Mauricio Vila invitó a su equipo de trabajo a seguir el ejemplo de los héroes de la Independencia y luchar por construir una mejor Mérida, una Ciudad Blanca, que se caracterice por sus valores, por sus tradiciones, por su transparencia pero, sobre todo, por su entrega total a sus ciudadanos, y le recordó que nada se puede lograr sin el apoyo y la participación de los ciudadanos.

Mauricio Vila Dosal, alcalde de Mérida, subrayó que el problema de la independencia de los pueblos es, hoy, el de la interdependencia de los pueblos, ya que en la era de la globalización tienden a borrarse las fronteras, por lo que el reto de México, de Yucatán y de Mérida es ser distintos y distinguibles.

También reiteró su disposición para trabajar en coordinación con los otros órdenes de gobierno.

La Lic. Mézquita Méndez recordó a quienes le antecedieron como oradores huéspedes desde que se instituyó esa distinción hace 33 años, y las ideas y propuestas que en su momento presentaron, así como los hechos acontecidos en ese período, los cambios que ha tenido Mérida, y presentó su propuesta:

—Queremos seguir celebrando una Mérida blanca de voces diferentes, la queremos blanca en la medida que sea como la luz blanca de la cual proceden todos los colores del espectro. Mérida diversa y multiplicada, plural y llena de vida, donde se procure el frágil equilibrio entre la tradición y la modernidad, donde la modernidad no es la destrucción de la memoria, y donde la tradición tampoco sea la negación del presente y el romanticismo ciego.

—Le agradezco a Mérida todo lo que nos brinda día a día. Esta vida diaria rítmica y sencilla en la que cobra sentido cada cosa de lo cotidiano. Los días con sus noches, los fines de semana, los amaneceres, el clima que nos hace resistentes y la escurridiza tranquilidad que aún sobrevive. Desde esta Mérida quiero abrazar a nuestra patria chica: las fronteras yucatecas. Y a nuestra patria grande: las dilatadas fronteras mexicanas. Le reconozco a Mérida en esta fecha emblemática y ya escrita para la posteridad su señorío y su gran dignidad. Indiscutibles.