jueves, 17 de septiembre de 2015

septiembre 17, 2015
Pedro Echeverría V.

1. Nuestra querida compañera Gina Marrufo Corrales –una de las representantes de la CNTE en Yucatán, quien además lleva batallando casi 35 años con posiciones de izquierda a favor de los explotados- fue brutalmente conminada ayer 16 de septiembre a retirarse de la plaza principal, junto con sus compañeras que enseñaban mantas y carteles de protesta contra los falsos festejos de la llamada “Independencia de México”. ¿Cuál independencia –denunciaba- si México después de ser colonia de España se convirtió en patio trasero del imperialismo de los EEUU?

2. No se sabe si los policías actuaron por órdenes del gobernador Zapara Bello o por mandos policiacos más funestos e ignorantes; de todas maneras son los mismos grupos paramilitares que ordenan la represión en México. Yucatán –aunque es una de las entidades más miserables y pobres- ha sido hasta hace unos meses de los estados más pacíficos de la nación porque así ha sido formado por la religión y la tradición. Ni el gobierno reprime con saña ni las luchas llegan a ser radicales. Sin embargo ha comenzado a demostrarse que el gobierno reprime con ganas.

3. La CNTE y su lucha nacional contra la reforma privatizadora ha ayudado a despertar a maestros de Mérida, Valladolid, Ticul, Halachó, Hunucmá, por dar unos cuantos ejemplos. La batalla que encabezó la compañera profesora Neida Pat y la represión de que fue objeto al suspenderla de su plaza, demuestra que el gobierno de Peña Nieto y de Zapata Bello están llevando a la provocación y a la represión. Por ello en Yucatán gritamos junto a las profesoras Neida y Gina: ¡Alto a la represión! ¡respeto a los derechos de los maestros! ¡Muera la evaluación punitiva!

4. La plaza de Mérida, así como todas las plazas y calles, son territorios libres. Pobres gobiernos tontos o imbéciles que no lo entiendan. Yucatán puede liberarse de la opresión, como otros estados y pueblos. Espero que muy pronto en Yucatán pudiéramos concretar un grupo de 10 personas conscientes con el fin de celebrar algunas conferencias, charlas, debates en Mérida, otras ciudades y grandes poblaciones del estado; analizar y discutir los problemas políticos y económicos del país, así como las propuestas de solución. Sólo hay que organizarnos. (17/IX/15)