jueves, 9 de julio de 2015

julio 09, 2015
LA PAZ, 9 de julio de 2015.- Una imagen ha dado la vuelta al mundo en el primer día del Papa Francisco en Bolivia: un Cristo crucificado sobre una hoz y un martillo –símbolo del comunismo–, el regalo con el que el presidente Evo Morales lo recibió en La Paz.

Aunque los problemas de audio de las únicas imágenes en video transmitidas del encuentro no permiten entender toda la justificación de Morales al polémico regalo, sí resulta evidente el desconcierto del Pontífice.

“No está bien eso”, dijo el Papa ante la explicación de Morales que parece describir el presente como una réplica de una talla que hizo en los ‘70s el sacerdote jesuita español Luis Espinal Camps, asesinado en 1980 por la dictadura, y por quien el Pontífice rezó en el camino que lo condujo del aeropuerto de El Alto hasta La Paz.


 Poco antes del acto de intercambio de regalos y mientras recorría las calles de La Paz con dirección al Palacio de Gobierno, el Pontífice se detuvo en la zona donde se halló el cuerpo del sacerdote asesinado en la entrada del barrio de Achachicala. El Santo Padre pidió hacer un minuto de silencio y después rezó el Padre Nuestro junto a los fieles.

El regalo suscitó distintas reacciones en las redes sociales. Muchos acusan a Morales de querer politizar la visita del Papa.


Asimismo, católicos de distintos países rechazaron el gesto de Morales por considerarlo ofensivo a las numerosas víctimas de los grupos terroristas en América Latina y de los históricos regímenes totalitarios comunistas.

 El Obispo de Roma apenas estuvo cuatro horas en La Paz, capital de Bolivia, el día de su llegada en el marco de la visita apostólica que realiza hasta el próximo día 13 a Ecuador, Bolivia y Paraguay.

Después de ser recibido por las autoridades, el Pontífice se desplazó hasta el Palacio Quemado, la sede del Gobierno, situado en los alrededores de la Catedral de la ciudad, para el habitual intercambio de regalos con el Presidente Evo Morales.

Luego de la reunión privada con Morales y el intercambio de obsequios, el Papa Francisco se desplazó hasta la Catedral, donde mantuvo un encuentro con las autoridades. En su discurso, afirmó que las ideologías encandilan mientras que la fe alumbra y guía la conciencia.

“Los cristianos, llamados a ser fermento en el pueblo, aportan su propio mensaje a la sociedad. La luz del Evangelio de Cristo no es propiedad de la Iglesia; ella es su servidora, la Iglesia debe servir al Evangelio de Cristo para que llegue hasta los extremos del mundo”.


“La fe es una luz que no encandila, las ideologías encandilan, la fe no encandila, la fe es una luz que no obnubila, sino que alumbra y guía con respeto la conciencia y la historia de cada persona y de cada convivencia humana”, indicó.
Padre Lombardi: El Papa desconocía existencia de Cristo sobre hoz y martillo que le dio Evo

El director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, confirmó que el Papa Francisco no sabía que Evo Morales le iba a regalar un Cristo sobre la hoz y el martillo tallado en madera y desconocía su existencia.

En conferencia de prensa realizada hoy en Santa Cruz (Bolivia), el P. Lombardi dijo sobre el controvertido regalo que el Papa “no lo conocía como tampoco yo lo conocía. Ninguno lo conocía”.

En el primer acto de su viaje a Bolivia luego de la ceremonia de bienvenida, el Santo Padre llegó anoche hasta el Palacio de Gobierno en La Paz para sostener un encuentro privado con el Presidente Evo Morales. El mandatario le regaló una autobiografía, un libro sobre el tema del acceso al mar y la polémica pieza.

Según informó la prensa, se trata de una réplica de una talla hecha por el sacerdote Luis Espinal Camps, jesuita asesinado en 1980 y por quien rezó ayer en la tarde el Pontífice en su camino hacia La Paz proveniente del aeropuerto de El Alto.

El P. Lombardi, que también pertenece a la Compañía de Jesús, narró a la prensa que preguntó a los jesuitas presentes en la Misa de Santa Cruz esta mañana y le confirmaron que era una réplica de “algo diseñado por Espinal, no fue algo que se haya hecho ahora”.

El vocero del Vaticano dijo que “no muchas personas conocían esto (la talla de madera). He preguntado a muchos al respecto pero no era algo muy difundido ni es algo que fuera diseñado por Espinal para alguna campaña”.

El P. Lombardi dijo que “ni los obispos ni otros jesuitas conocían este símbolo particular pero es verdad que viene” del P. Espinal y dijo además que según le informaron sus hermanos jesuitas, el fallecido presbítero “lo hizo con una actitud de diálogo muy abierto con todos. No era una interpretación ideológica específica sino algo que él diseñó”.

El P. Lombardi comentó además que ni el regalo ni las condecoraciones que Morales impuso al Papa eran algo previsto y que ni el Nuncio estaba al tanto de los obsequios.

“El Papa nunca ha aceptado condecoraciones honoríficas. Es un principio muy general. Siempre ha dicho que no desea esos honores. En ese sentido no estaba previsto por el Papa”.

Al ser preguntado sobre la existencia de algún proceso para llevar a los altares al P. Luis Espinal, Lombardi dijo que “no tengo información de si las diócesis ni la Compañía de Jesús hayan propuesto esta causa de beatificación. Hay decenas de jesuitas muertos por la justicia. No pensamos que tengamos que beatificarlos a todos, es nuestra vocación dar nuestra vida por el testimonio de la fe y la justicia”.

“No podemos decir si son todos mártires. No podemos decir que hayan dado su vida por ser testimonios de fe. Eso no quiere decir que no aprecie a Espinal. El Papa ha dicho palabras muy bellas cuando pasó por el sitio dedicado a él”, afirmó Lombardi. (aciprensa.com)