jueves, 4 de junio de 2015

junio 04, 2015
BUCTZOTZ, Yucatán, 4 de junio.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) decomisó 19 ejemplares de vida silvestre a una Unidad de manejo para la Conservación de la vida silvestre (UMA), ubicada en el municipio de Buctzotz, Yucatán, tras detectar faltas al trato digno y respetuoso hacia los animales.


La Delegación Federal de la PROFEPA en el estado informó que se trata de 6 ejemplares de Venado cola blanca (Odocoileus virginianus), 11 Patos pijiji (Dendrocygma aumnalis) y 2 monos araña (Ateles geoffroyi); estos últimos enlistados en la NOM-059-SEMARNAT-2010.

Durante la diligencia realizada, los inspectores de esta dependencia federal adscritos al estado de Yucatán observaron en los mamíferos, primates y aves, signos de deshidratación, inanición y debilidad, e incluso muestras de alopecia en los monos. Asimismo, constataron que los espacios destinados para la estancia de los ejemplares eran reducidos.

Dicha acción fue resultado de un procedimiento administrativo instaurado contra el inspeccionado, quien, en primera instancia, no pudo comprobar la legal procedencia de los ejemplares, por lo que personal de la PROFEPA en la entidad determinó realizar algunas diligencias.

Los 19 animales decomisados fueron trasladados al Predio que maneja vida silvestre en forma confinada, fuera de su hábitat natural (PIMVS) denominado “Blanca flor”, ubicado en Valladolid, Yucatán.

El mono araña se encuentra en la categoría de Peligro de extinción (P) en la NOM-059-SEMARNAT-2010, que establece el catálogo de especies con alguna categoría de riesgo.

En tanto, los ejemplares de Venado cola blanca y Pato pijiji están regulados por la Ley General de Vida Silvestre (LGVS) vigente por lo que el aprovechamiento de los ejemplares citados debe contar con una autorización emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).

La PROFEPA realiza de manera permanente Operativos especiales y labores de inspección y vigilancia en materia de vida silvestre en todo el país, promoviendo su conservación y asegurando la protección de los recursos naturales.

El aprovechamiento de ejemplares de vida silvestre sin la autorización respectiva es sancionado con una multa de hasta 50,000 veces el salario mínimo vigente en el Distrito Federal, y con el decomiso de los ejemplares establecido en la Ley General de Vida Silvestre. (Boletín)