BUENOS AIRES, Argentina, 9 de junio.- "Ciento por ciento". El secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, aseguró esta mañana que el paro de hoy tiene una adhesión del "ciento por ciento" en el transporte.
El jefe de los conductores de colectivos y ómnibus advirtió que la medida de 24 horas "no es un capricho de los trabajadores" sino un reclamo contra el Gobierno, y recordó que urge "sentarse a dialogar" porque, de lo contrario, habrá nuevas medidas en el corto plazo.
"Es un paro que lamentablemente se realizó debido a que los funcionarios no quieren sentarse a una mesa a escuchar el reclamo de los trabajadores", sostuvo el sindicalista en diálogo con radio La Red.
Luego, en declaraciones a radio Continental, Fernández indicó que la huelga era "total" en colectivos de corta, media y larga distancia, subterráneos y combis, y en la mayoría de las provincias del interior del país.
"Queremos un salario de bolsillo real y digno para poder tener poder adquisitivo", argumentó al referirse al alcance de la medida.
El gremialista sostuvo que el paro de hoy es provocado por el propio Gobierno, "porque no escuchan". Y agregó: "Si esto no lo arreglamos entre todos, no lo arregla nadie, la verdad. Con el sector empresario no podemos hablar más: este tema ya pasa por el Gobierno".
"Si no nos sentamos las tres partes juntas, no nos vamos a poder entender y esto va a ser un conflicto. Ojalá esto los lleve a reflexionar y que nos sentemos en una mesa", indicó.
Minutos después, consideró que "de no haber una pronta solución", habrá nuevas medidas en el corto plazo.
Qué pasa. Las centrales obreras opositoras llevan adelante hoy el quinto paro nacional desde que Cristina Kirchner está en el poder. La medida, de 24 horas, tiene sus rasgos distintivos: se desarrolla en medio del calendario electoral y uno de los ejes de la protesta es el pedido de paritarias libres.
Reclamos. Las demandas de la huelga de hoy son: paritarias libres, la eliminación o cambios en el impuesto a las ganancias, la suba a $ 12.000 del salario mínimo, un aumento de emergencia para jubilados, la devolución de los fondos de las obras sociales sindicales y "la inmediata puesta en marcha de un plan de erradicación del narcotráfico y la inseguridad".
Quiénes. Hace tres años, el pragmatismo gremial empujó a Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Pablo Micheli a unificar sus acciones y encabezar las protestas en contra del Gobierno. Hoy, tal como ocurrió el 31 de marzo pasado, los tres referentes de las centrales obreras opositoras se sumaron a una iniciativa que activó originalmente la alianza de 22 gremios del transporte que se anida bajo las siglas de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT). (lanacion.com.ar)
