domingo, 28 de junio de 2015

junio 28, 2015
FLORIDA, 28 de junio.- El propulsor Falcon 9 de la compañía espacial privada SpaceX explotó minutos después de su despegue desde Cabo Cañaveral, en Florida,  en el marco de una misión para llevar insumos a la Estación Espacial Internacional (ISS). "El vehículo explotó", confirmó el comentarista de la NASA George Diller después de que la agencia espacial mostrara imágenes del cohete desintegrándose en pedazos.

En la sala de control reinó el silencio después de que las imágenes mostraran la explosión del propulsor y la caída de sus partes hacia la Tierra. "El vehículo sufrió una anomalía en el ascenso y el equipo está investigando qué sucedió", informó la compañía a través de su cuenta de Twitter.


El cohete, que llevaba dos toneladas de suministros,  había iniciado su despegue a las 10:21 y era la séptima misión de la empresa privada para la NASA. "El equipo todavía desconoce exactamente lo que pasó", añadió Diller.

"Hubo una anomalía en la primera fase del vuelo", dijo, al relatar que el cohete había encendido sus nueve reactores Merlin y alcanzado una velocidad supersónica. "Sin embargo parece que algo salió mal durante la primera parte de las operaciones", añadió en referencia a la fase de vuelo que precede el momento en que el propulsor se separa de la cápsula, una vez alcanzada la órbita.

Este no es el primer lanzamiento fallido a la estación en órbita. En abril, una nave de carga rusa se descontroló y se desintegró el aire. Lo mismo sucedió en octubre del año pasado cuando otra nave de suministro de Space X se destruyó en un accidente en el mismo lanzamiento.

Space X (Space Exploration Technologies), dirigida por el millonario Elon Musk, es la primera compañía privada que ha logrado un contrato con el gobierno de Estados Unidos para llevar a cabo este tipo de operaciones. En 2017 tiene previsto lanzar su primera misión tripulada. (clarin.com / bbc.com)