WASHINGTON D.C., 13 de mayo.- Al menos cinco personas perdían la vida en la noche del martes cuando el tren 188 de Amtrak que cubría la ruta Washington-Nueva York descarrilaba pasadas las nueve de la noche a la entrada de Filadelfia, según declaró en rueda de prensa el alcalde de la ciudad, Michael Nutter. Otras seis personas se encontraban en estado crítico. Las imágenes en la oscuridad mostraban equipos de rescate armados con linternas en busca de víctimas y heridos entre las más de 240 personas que viajaban a bordo del tren (238 pasajeros y cinco miembros de la tripulación). Las primeras investigaciones apuntaban a que el descarrilamiento había sido accidental, según fuentes oficiales.
El departamento de bomberos de la ciudad confirmaba al menos 50 heridos. Amtrak ponía un teléfono de información al servicio de los familiares de la gente que viajaba a bordo del tren 188: 1-800-523 91 01. Los hospitales de la zona atendían a los heridos y estaban preparados para acoger a las víctimas a medida que eran desalojadas por los equipos de rescate de entre los vagones aplastados.
Un empleado de Associated Press que viajaba en el convoy, Paul Cheung, declaró que los primeros vagones del tren volcaron al entrar en una curva. “Tiene mala pinta”, dijo, declarándose afortunado de haber ido sentado en los últimos vagones.
El excongresista Patrick Murphy estaba a bordo del tren siniestrado y ayudó a gente a salir de los vagones. Murphy tuiteó fotos de los bomberos mientras trabajaban evacuando gente de entre los vagones afectados.
En un escueto mensaje en Twitter, la compañía Amtrak decía que estaba al tanto de un descarrilamiento y que proporcionaría detalles según los tuviera. El siguiente mensaje de Amtrak anunciaba que había heridos entre los viajeros y que quedaba cancelado el servicio entre Washington y Nueva York.
También en Twitter, existían informaciones que aseguraban que había habido fuego en al menos uno de los vagones. La hipótesis del terrorismo no estaba descartada cuando todavía no se conocían las causas del accidente aunque según avanzaba la noche todo apuntaba a un accidente. El conocido como corredor Este ferroviario, que une Boston con Washington, situándose en medio Nueva York, es muy transitado y se prevé que este miércoles sea caótico en el tráfico ferroviario y aéreo debido a las cancelaciones. (Yolanda Monge / El País)
