lunes, 16 de marzo de 2015

marzo 16, 2015
MÉRIDA, Yucatán, 16 de marzo.- "Si no ponemos límites con amor y con respeto, tendremos hijos profundamente insatisfechos", expresó Josefina Vázquez Mota este domingo durante la presentación de su libro "Cuando los hijos mandan", realizada en el marco de la última jornada de la Feria Internacional de la Lectura Yucatán (Filey) 2015.

Presentación del libro "Cuando los hijos mandan" en la Filey (fotos: JMRM)

"México es nuestra casa grande... no es más que reflejo de lo que ustedes y yo hacemos todos los días, construimos todos los días o destruimos todos los días en nuestro propio México... que se llama nuestro hogar, que es nuestra familia",  explicó la ex candidata a la Presidencia de México.


"Hoy vengo a plantearnos esta pregunta y esta un poco provocación ¿y ustedes y yo, qué clase de gobernantes estamos siendo en nuestra patria, en ese México al que regresamos todas las noches cargados de esperanza o de frustración, a ese México del que salimos hace rato en la mañana para estar hoy aquí, compartiendo este momento?", planteó la también ex Secretaria de Desarrollo Social y Educación.

"Ustedes y yo somos gobernantes, particularmente los que somos padres de familia, pero los que son nuestros hijos también son a quienes gobernamos bien o gobernamos mal", dijo.

Vázquez Mota lamentó la falta de voluntad por parte de gran cantidad de padres de familia para responsabilizarse por sus hogares:

"En México tenemos 7 millones de mujeres jefas de familia, porque 7 millones de hombres un día dijeron "voy a comprar unos cigarros" y nunca regresaron... entonces de pronto dijeron "yo nada más quería ser papá, pero ya eso de ejercer la autoridad, de poner límites, de mantener a una familia, eso a mí ya no me gusta""

La autora comparó a este tipo de padres con los gobernantes que no quieren ejercer su autoridad para no perder popularidad, indicando que las primeras clases de impunidad se reciben en el hogar, por ejemplo cuando a la madre le angustia más la tarea que al niño y la hace por él.

Vázquez Mota opinó que al darle todo a los hijos se les ha dejado de dar lo que sí tuvieron sus padres al crecer: lecciones sobre sacrificio y esfuerzo y hambre de triunfo.

"Hoy cuando una mamá va tarde un minuto, un minuto por su bebé, un joven inútil de 23 años, está viendo cómo le pide perdón... porque ese joven, o esa señorita la va a castigar, se va a poner sus audífonos y va a empezar a escribir en su teléfono porque llegó un minuto tarde, le dio un rayo del sol, ya lo expuso a cáncer de piel y le salieron tres pecas", lamentó.

"¿Cómo le pedimos a una autoridad que ejerza su autoridad cuando en muchos hogares hoy en México los papás no queremos ejercer la autoridad con amor y con respeto?", cuestionó la candidata, recordando que a ella, ya casada a los 23 años de edad, todavía le imponía la presencia de su padre.

"Les teníamos respeto, a veces un poquito de temor. Me acuerdo que el lugar del papá era súper sagrado, nadie se sentaba ahí y hoy llegan los papás así con el plato como diciendo no más es un lugarcito en la mesa", dijo.

Vázquez Mota mencionó que ahora los hijos negocian todo con sus padres.

"Antes con la mirada uno sabía lo que tenía que hacer, y no había espacio a negociación... la pregunta es ¿qué ciudadanos estamos formando para México? ¿Por qué nos lastima tanto la impunidad si nosotros damos lecciones de impunidad? ¿Por qué nos lastima tanto esos hijos terriblemente insatisfechos que reclaman tantas cosas?", planteó.

La panista reconoció que el mundo ha cambiado y que actualmente contamos con más tecnología y opciones de consumo, advirtiendo:

"Si no ponemos límites con amor y con respeto, tendremos hijos profundamente insatisfechos porque aparte creerán que solamente se es feliz teniendo todo lo que quieren en el momento que quieren y como lo quieren... no habrá, como dice Carlos (Clerico), la menor resistencia a la adversidad. A la primera adversidad les va a entrar la depre... yo me acuerdo que en nuestra época esa palabra ni existía, te quitaban la depresión pero en un instante".

Vázquez Mota llamó a reflexionar sobre qué mensaje se da a los hijos cuando se les dice que su única responsabilidad es estudiar y no involucrándolos en los demás aspectos de la vida en el hogar, llamando también a aprender de los hijos y escucharlos. 

"Seamos aquello que le pedimos a los otros. A la autoridad lo primero que le pedimos es cumplir y hacer cumplir la ley, y tal vez no está mal pensar que nuestros hijos lo primero que nos están pidiendo a gritos es cumplir y hacer cumplir, en nosotros primero y luego en ellos, los límites del amor y del respeto", opinó.

La autora reconoció la labor de la Filey, al igual que el trabajo de la Dirección de Cultura del Ayuntamiento de Mérida:

"A mí me anima mucho esta Feria del Libro. Yo sé que hay quienes se fueron, como merecidamente lo tienen, a descansar a Progreso y a otros lugares... pero este salón lleno, en domingo, a las 4 de la tarde, a la hora de la comida. Yo no sé si me pusieron esta hora porque me quieran mucho o porque no me querían tanto, pero yo estoy muy feliz de ver este salón tan lleno de vida, tan lleno de convicción, tan lleno de compromiso".

"Me da mucho gusto saber que la alcaldía tiene su Dirección de Cultura, su Subdirección de Fomento a la Lectura. Un niño que toma un libro entre sus manos... difícilmente será un adulto que tome un arma entre sus manos porque todo lo que es cultura ayuda a educar el alma".

El evento, realizado en el salón Juan García Ponce ante centenares de personas, también contó con la presencia de Francis Flores, María Rosado y Rosado, Mariana Dibella y Carlos Clerico en el presídium.

El prólogo de la obra, editada por Grijalbo, estuvo a cargo de Manuel Mondragón y Kalb, ex Comisionado Nacional de Seguridad.

El acto fue seguido por la presentación del libro "Érase una vez México 2" de Sandra Molina y Alejandro Rosas, quienes hicieron manifiesta su molestia por el hecho de que la presentación de Vázquez Mota les quitó poco más de 20 minutos de su tiempo. (JMRM)