martes, 24 de marzo de 2015

marzo 24, 2015
MADRID, España, 24 de marzo.- La actriz de Hollywood Angelina Jolie se sometió la semana pasada a una cirugía de retirada de ovarios y trompas de Falopio preventiva para reducir la posibilidad de padecer cáncer, una enfermedad de la que murieron su madre, su abuela y su tía.

Como hiciera con la doble mastectomía —extirpación de ambos senos— a la que se sometió hace dos años, la actriz de 39 años explicó los motivos de su decisión en una columna de opinión publicada este martes en el diario The New York Times para que "otras mujeres en riesgo conozcan las opciones que hay". Según Jolie, la extirpación de ovarios es "menos compleja que la mastectomía", pero tiene efectos "más severos", como que pone a la mujer en una "menopausia forzada".


"Hace dos años escribí sobre mi decisión de tener una doble mastectomía preventiva. Un simple análisis de sangre reveló que llevaba una mutación en el gen BRCA1. Me dio un estimado de 87% de riesgo de cáncer de mama y un riesgo del 50% de tener cáncer de ovario. Yo perdí a mi madre, a mi abuela y a mi tía de cáncer", dice la actriz en este artículo.


Añade: "Quería que otras mujeres en situación de riesgo supieran las opciones que hay. Prometí hacer un seguimiento con cualquier información que pudiera ser útil, incluyendo mi próxima cirugía preventiva, la extirpación de los ovarios y las trompas de Falopio. Yo estuve planeándome esto durante algún tiempo. Me he preparado físicamente y emocionalmente, discutiendo opciones con los médicos, investigado la medicina alternativa y la cartografía de mis hormonas de estrógeno o progesterona de reemplazo".

Luego la actriz explica: "Hace dos semanas recibí una llamada de mi médico con resultados de pruebas de sangre. 'Tu CA-125 es normal', dijo. Di un suspiro de alivio. Esa prueba mide la cantidad de la proteína CA-125 en la sangre, y se utiliza para controlar el cáncer de ovario. Lo tengo cada año a causa de mi historia familiar."

Una vez sometida a la operación Jolie añade: "Independientemente de los reemplazos hormonales que estoy tomando, tengo la menopausia. No podré tener más niños y espero algunos cambios físicos. Pero estoy tranquila con lo que llegue; no porque sea fuerte, sino porque es parte de la vida. No es algo a lo que temer", sostiene. (Mábel Galaz / El País)