sábado, 24 de enero de 2015

enero 24, 2015
Yo Soy UADY (XII)

Juan Acuesta Rodríguez

Parece mentira o curioso que los estudiantes de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY)  aparezcan de pronto para promover amparos en contra del movimiento de huelga de la Asociación Única de Trabajadores Administrativos y Manuales de la Universidad Autónoma de Yucatán (AUTAMUADY),  cuando estos jóvenes universitarios de hoy no son capaces de protestar ante los malos maestros (académicos improvisados en sus cátedras, tiempos muy prolongados que se toman para revisar tesis, lo mismo que exámenes de grado).

Específicamente, fueron alumnos del décimo semestre de la Facultad de Derecho quienes promovieron amparos ante el Tribunal del Poder Judicial de la Federación por sentirse afectados en su derecho a la educación, como dicta la Constitución. Que también dicta, por cierto, el derecho a un pago digno para el trabajador.

A toda luz se ve la injerencia de directivos y de algunos maestros y, desde luego, la mano del rector Dr. José de Jesús Williams, ante esas acciones.

La huelga en el CIR de Ciencias Sociales (foto: JMRM)

Los alumnos no protestan ante maestros incompetentes porque pueden ser sancionados en alguna materia o en la misma carrera que estén cursando, pero ahora sí, los chicos se ampararon. Qué pena que se recurra a este derecho de una manera tan perversa.

Y qué pena que los alumnos no puedan ampararse ante malos maestros que están cobrando porque ahora sí, sólo cobran y no cumplen como debe ser en una cátedra.

Es una llamada de atención a la comunidad universitaria,  es una llamada de atención a todos aquellos que se dejan manipular. Es una llamada de atención para todos los ciudadanos que de la misma manera somos manejados por gente tan corrupta y tan maligna que vende la idea de que cualquier movimiento de esta índole va en contra del desarrollo de una universidad y de una nación.

Los altos funcionarios de la UADY cobran sueldos y compensaciones onerosas, ofensivas a la realidad de nuestro país, a la realidad de nuestro Estado. Los administrativos tienen sueldos desproporcionados con respecto a los sueldos de estos personajes. Y qué decir de los préstamos a los que tiene acceso el personal de confianza de la UADY.  (Enlace de interés Compensación mensual del rector, mayor al aumento que solicita la AUTAMUADY)

Yo invito al Sr. Williams a que renuncie a su compensación, que renuncie a todas las prestaciones médicas a que tiene derecho y que se sostenga con los 80 pesos que está ofreciendo al personal administrativo y manual.

Anoche, 425 trabajadores de  660 que se apersonaron (son 767 el total) al Sindicato de la AUTAMUADY  votaron para que siga la huelga (235 votaron en contra) y calificaron como “migajas” y una “miseria” la oferta de la Rectoría: un aumento adicional al 3.4% salarial consistente en $40 en vales y $40 en ayuda de transporte al mes (de $190 a $230). Cuando los asambleístas de la Autamuady oyeron ayer por la tarde la oferta adicional al 3.4% que ofreció la Rectoría, la respuesta masiva que surgió fue: “aplíquenselo al sueldo del rector”.

La AUTAMUADY mantiene su solicitud de aumento del 10 por ciento.

La secretaria general, Sofía del Socorro Solís Sierra, debe fortalecer la unidad, pues los números del domino en la JLCA fueron de 709 a favor de la huelga, 22 se pronunciaron en contra y cuatro anularon su voto, mientras que en la asamblea de ayer el voto favorable dio un bajón a 425 sindicalizados, como contabilizamos.

Pero bueno, lo más importante es que la asamblea aprobó que continúe el paro hasta el final y el Sindicato rechazó anoche la nueva oferta salarial de la Rectoría.

Por su parte, los comisionados de la Rectoría, el Abogado General Renán Solís Sánchez y el director general de Finanzas, Manuel Escoffié Aguilar, ofrecieron, además del 3.4%,  un aumento mensual de $40 en vales y $40 a la ayuda de transporte.

También informan los periódicos que la UADY presentó ante el Tribunal del Poder Judicial de la Federación su recurso de amparo contra el dictamen de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, en busca de que quede sin efecto la declaratoria de la legalidad de la huelga. El Abogado General acudió al Juzgado V de Distrito para darle seguimiento a la solicitud que hizo el día anterior.

Renán Solís insistió en que la Rectoría mantiene abiertos los tres caminos que anunció desde el inicio del paro: la defensa jurídica, la gestión de recursos y el diálogo con el sindicato.

En cuanto a los estudiantes, que son la vida y el motor de una universidad, que tienen el pensamiento mas no la voz para señalar todas estas inequidades que se dan en la Universidad,  ahora sí tuvieron –algunos, esperamos que no la mayoría-- la luz para ampararse; qué pena y de verdad digo qué pena que esto ocurra en una de las consideradas mejores universidades del país, porque si esto es así, ¿cómo estarán las demás?

Me llama la atención que la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado también se involucre en este movimiento ofreciendo instalaciones para desarrollar las clases cuando la Universidad presume de una soberana autonomía y en este caso no se involucra la autonomía, según parece; lo que  sí queda  claro es un vínculo muy estrecho entre la Rectoría y los veterinarios. Y digo los veterinarios porque existe una línea ininterrumpida de ellos en la Rectoría desde hace 16 años más los que le siguen, quizá.  Como que existe un personaje que es el cerebro perverso de esta línea enfermiza y decadente que está viviendo la UADY.

(Hablando de instalaciones, en tiempos recientes se firmaron convenios o comodatos muy oscuros entre la UADY y algunas instancias de la SEP para que ésta ocupe los inmuebles que han dejado las Facultades para irse a sus nuevos campus. Sería interesante ver quién o cómo se beneficia con esto. )

Así como se comportan estos jóvenes, ojalá se les prenda el foquito y se vuelvan a iluminar para promover un cambio en su proceso electivo para dentro de cuatro años para la Rectoría y sí es posible lograrlo si académicos, administrativos, manuales y estudiantes se lo proponen para que los 51 títeres del Consejo Universitario dejen de ejercer su voto controlado y sea la comunidad universitaria la que elija a quien en lo futuro conduzca a los directivos de la alma máter.

Es cuanto.