viernes, 23 de enero de 2015

enero 23, 2015
FLORENCIA, Italia, 23 de enero de 2015.- El primer ministro italiano, Matteo Renzi, y la canciller alemana, Angela Merkel, valoraron hoy las últimas decisiones del Banco Central Europeo (BCE) como un impulso a la recuperación económica de la Unión Europea (UE).

Merkel declaró en Florencia (centro de Italia) sobre el programa de compra de deuda anunciado el jueves por el BCE que incluye decisiones "muy importantes. Creo que todo eso que se pondrá en práctica dará un impulso" a la recuperación económica.

La Canciller de Alemania recorrió la Galleria degli Uffizi guiada por su anfitrión, el primer ministro de Italia, Matteo Renzi. Enlace a galería de la visita a la Galería.

"Siempre se puede hacer más, pero lo que se ha hecho está hecho, ahora hay que trabajar", consideró Renzi al final de la cumbre bilateral que reunió a ambos líderes en la capital toscana, de la que el primer ministro fue alcalde antes de ser nombrado jefe del Gobierno italiano.

Otra galería, del Corriere Fiorentino

Renzi compareció ante la prensa junto con Merkel para analizar las medidas más recientes tomadas en la Unión Europea y aseguró que decisiones como las del BCE anunciadas por su presidente, Mario Draghi, no deben servir de excusa para "bloquear las reformas".

"Italia puede y tiene que poner el 'turbo' en todas las reformas. Atención a quien piense que hay que reducir la marcha", manifestó gráficamente el primer ministro italiano.

"Hay que ir ahora más rápidamente, ser más decididos", añadió Renzi delante de la escultura de "David" de Miguel Ángel, junto a la cual compareció con Merkel, que llegó el jueves por la noche a Florencia desde Davos (Suiza).

Tanto Merkel como Renzi habían participado en esa localidad alpina en el Foro Económico Mundial, al tiempo que desde Fráncfort Draghi daba detalle de las iniciativas del BCE, sobre las cuales las autoridades alemanas no han ocultado su falta de acuerdo completo.

La cumbre ítalo-germana llega en un momento en el que el Gobierno de Renzi intenta sacar adelante las reformas anunciadas por él mismo el año pasado, pero cuya aprobación definitiva está ralentizada por su tramitación parlamentaria.

Tras la aprobación de la reforma laboral, que le generó a Renzi la oposición frontal de los sindicatos italianos con una huelga general en diciembre, el primer ministro intenta ahora sacar adelante la reforma de la ley electoral con el apoyo determinante del ex primer ministro conservador Silvio Berlusconi.

Y al tiempo los partidos políticos italianos, tanto el Partido Demócrata (PD) en el Gobierno como los de la oposición, negocian sobre los eventuales candidatos a sustituir al dimitido Giorgio Napolitano al frente de la Presidencia de la República.

"Me tranquiliza mucho lo que pasa en Italia, hay reformas, se dan pasos importantes también desde el punto de vista psicológico", dijo Merkel, quien se reunió en Florencia con empresarios alemanes que tienen actividad en territorio italiano.

"Los empresarios alemanes con los que me reuní esta mañana me han dicho que ahora pueden programarse, no tienen ya miedo de costes que no se pueden calcular, que pueden actuar de manera más clara", contó la jefa del Gobierno alemán.

Renzi, por su parte, protagonizó un discurso comprometido con lo que definió como "elementos de fuerza" de la UE.

Entre estos mencionó la capacidad de los Veintiocho de representar "valores e ideales", y elogió la creatividad y "la belleza" como aportaciones italianas después de ilustrar a los presentes en la conferencia de prensa con ejemplos de la gran creatividad florentina tomados de los genios del Renacimiento.

Merkel no escatimó en público elogios a la senda de las reformas señalada por Renzi y dijo que el plan del jefe del Gobierno italiano es "muy ambicioso" y "muy importante", y se mostró confiada en que producirá resultados.

El primer ministro italiano "tiene un programa de reformas increíblemente ambicioso, devolverá esperanza a los jóvenes y seguridad a la gente".

La canciller federal alemana aludió además al plan del presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, para estimular las inversiones públicas y dijo que tiene "una función importantísima, es un proyecto ambicioso y lo llevaremos adelante". (EFE / Repubblica)