MÉRIDA, Yucatán, 22 de enero.- El pasado martes el Mérida Fest rindió homenaje al pintor yucateco Fernando Castro Pacheco.
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| José Díaz Cervera, Santiago Pérez, Luis Rius Caso y Jorge Cortés Ancona (foto: JMRM). |
"Fernando Castro Pacheco plasmó con maestría los problemas de su tiempo", expresó Jorge Cortés Ancona durante la mesa panel realizada en el Museo de la Ciudad.
"Cada época irá diciendo su razón, su verdad sobre el artista. Cada época irá construyendo sobre él", añadió, procediendo a recordar la trayectoria del maestro en la Ciudad de México.
"Es una trayectoria que hay que valorar como muy exitosa, aunque tuvo sus momentos difíciles", indicó.
"Cuando llegó a la Ciudad de México en 1943 para vivir en ella 25 exitosos años, la entonces amable Capital de la República atravesaba un momento de esplendor en las artes y la cultura. La Escuela Mexicana de Pintura alcanzaba un punto culminante en cuanto a su expansión internacional. Por otro lado, la Contracorriente opuesta de esa escuela encabezada por artistas tan notables como María Izquierdo, Agustín Lazo, Rodríguez Lozano y Julio Castellanos, entre otros", recordó.
Indicó que varios artistas de la época "lograban sobreponerse con éxito al ninguneo que en diversos grados los había marcado y amargado en varios casos"-
"La crítica de arte a su vez gozaba también de un esplendor pocas veces visto por la calidad de sus exponentes y por la diversidad de postura que se encontraba, a veces de manera feroz", indicó Cortés Ancona.
"El joven yucateco de 25 años llegaba con un notable bagaje y se insertó de inmediato en la tradición del realismo mexicano. Las tres obras murales realizadas por él en su estado natal no pasaron desapercibidas para los entonces mandarines del arte nacional ni tampoco sus preciosas acuarelas de temas cotidianos realizados también en el terruño que antes de su llegada a la capital ya le vendía a la legendaria galería de Inés Amor", expuso.
Luis Rius, director del Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, abundó sobre la importancia de Castro Pacheco en el devenir de la plástica mexicana y el contexto en el que inició su carrera.
"Hablar de Castro Pacheco implica el terreno de la gráfica", señaló el ponente.
Santiago Pérez Garci, Director del Museo Nacional de la Estampa, profundizó respecto a la obra del homenajeado en el Taller de la Gráfica Popular y destacó cómo consolidó una carrera, durante la cual le tocó vivir las grandes definiciones y contradicciones del arte mexicano y la política que marcó el siglo XX.
Finalmente, José Díaz Cervera habló acerca del erotismo en la obra del artista, con quien tuvo una cercana amistad y colaboración.
"A partir de ese trabajo que yo tuve el honor y la dicha de realizar, para mí se abrió una dimensión distinta del don Fernando conocido a través de los murales. Empecé a observar en mi amigo una gran vocación sensual y un profundo sentido erótico en buena parte de su obra", dijo.
"Mirar un cuadro de Fernando Castro Pacheco supone toda una aventura para la mirada en tanto que ésta es exigida por lo maravilloso y lo extraño que desarrollan en nosotros la curiosidad, el encanto y la sorpresa pero, sobre todo, una gozosa resonancia que une nuestra subjetividad con el cosmos, desbordando los límites de la mirada y lo mirado para hacernos recordar que en nuestros ojos están las puertas de todas nuestras pasiones y seducciónes", añadió.
"Si mirar es trascender, en un cuadro de Fernando Castro Pacheco se develan todas las posibilidades de nuestros sentidos. Su pintura no es solamente una síntesis de formas y colores sino una entidad sinestécica que puede olerse, saborearse y escucharse dentro de una especie de juego de espejos que nos hace dudar si somos nosotros quienes miramos la obra del pintor yucateco o es ella la que nos mira e incluso nos revela a través de su mirada", reflexionó.
Asistieron al evento doña Blanca Sol Sumohano viuda de Castro, además de otros familiares del homenajeado; el presidente de la Fundación Fernando Castro Pacheco Raúl Casares G. Cantón; el director de Cultura del Ayuntamiento de Mérida, Irving Berlín Villafaña; el director del Museo de la Ciudad, José Manuel Civeira García; el periodista Conrado Roche Reyes; el antropólogo y fotógrafo Christian Rasmussen y el poeta José Díaz Cervera, entre otras personas. (JMRM)
