MÉXICO, 11 de noviembre.- “Soy lesbiana, no hay problema para comenzar un procedimiento de reproducción asistida”, “también atienden a parejas gay” suelen preguntar algunas mujeres cuando se acercan a nuestra organización si no es que callan y prefieren decir que son madres solteras, refiere en entrevista, Gabriela García, presidenta de la organización Pronto Nacerán Nuestros Hijos (Pronanhi) en el marco de la Feria Informativa “Maternidades lésbicas y paternidades gay”.
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| Imagen: Archivo |
De acuerdo con la psicóloga, es cada vez más frecuente el acercamiento de personas de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, travesti, transgénero e intersexual (LGBTTTI) en búsqueda de un medio asistido de reproducción para tener hijos o hijas.
Sin embargo, refirió que lo principal es que las y los interesados, independientemente de su orientación o preferencia sexual, deje a un lado sus propios prejuicios, pues estos son los que impiden un primer acercamiento con los médicos, los cuales, aseguró, al menos en el caso de los que trabajan con su asociación, no tienen ningún problema en atender a la comunidad de la diversidad sexual.
“El derecho a ser madre o padre lo tenemos todos y todas”, afirmó la experta quien recalcó la necesidad de legislar en materia de reproducción para que nadie quede fuera y se elaboren legislaciones incluyentes que contemplen a hombres y mujeres.
Sobre la atención brindada por Pronanhi, consistente en la canalización de las personas que necesitan servicios de reproducción asistida a espacios especializados, indicó que se otorga a bajos costos con médicos de gran experiencia.
En torno al flujo de población LGBTTTI asistente, explicó que la mayoría son mujeres que desean una inseminación. Lo que ha observado, comentó, es que hay mucha desinformación sobre varias situaciones. La primera, que las mujeres tienen un período en que son fértiles pero otros en los que ya no por lo que aún con los tratamientos más avanzados no es posible obtener los mejores resultados en edades ya avanzadas.
En segundo, dijo, sobre las infecciones de transmisión sexual pues algunas mujeres, en su afán por quedar embarazadas, acuden a “fiestas de semen” y si bien rectifican que los posibles donadores no tengan VIH, hepatitis C o B, no hacen lo mismo con otro tipo de infecciones más comunes como las causadas por la clamidea, micoplasma o ureaplasmas que obstruyen las trompas como un mecanismo de protección del cuerpo y dañan la capacidad reproductiva de la mujer.
En el caso de los hombres gay, el tema es el de la subrogación de vientres, que por cuestiones legales, sólo se puede hacer de manera legal en Tabasco, entidad donde se ha regulado la situación, explicó García, quien añadió que Pronahni no sólo trabaja con la persona o la pareja, sino en este caso, también con la mamá sustituta en la parte emocional.
Cifras proporcionadas por García revelan que alrededor de 10 por ciento de las y los usuarios de su organización son personas de la comunidad LGBTTTI y espera se incrementen pues este sector, al igual que toda la población, “tiene el derecho a tener familia”. “Una pareja de personas del mismo sexo es igual a cualquier otra pareja”.
Para mayores informes y asesorías visite http://www.pronanhi.org/ (Leonardo Bastida Aguilar / NotieSe)
