sábado, 4 de octubre de 2014

octubre 04, 2014
HONG KONG, 4 de octubre.- Hace una semana que un gran número de estudiantes de Hong Kong se manifiestan para pedir una democracia plena en la antigua colonia británica. Todo se estaba llevando a cabo de forma pacífica hasta el pasado viernes, momento en el que los enfrentamientos entre partidarios y opositores a las protestas prodemocráticas invirtieron la situación.

En Hong Kong, decenas de miles se manifestaron el sábado de nuevo por más democracia. (AFP)

Como respuesta a estos ataques y la supuesta pasividad de la policía, los líderes de las manifestaciones rompieron el diálogo con el Gobierno de Hong Kong y, ahora, es el jefe del ejecutivo el que lanza un mensaje muy claro: si el lunes no está restaurado el orden en la ciudad, tomará todas las medidas necesarias para que la “normalidad” vuelva a las calles.

El jefe de gobierno de Hong Kong, Leung Chun-ying, puso hoy hasta el lunes de plazo para que los manifestantes prodemocráticos pongan fin al bloqueo de las principales carreteras. Según declaró en un videomensaje, el gobierno y las fuerzas policiales tomarán "todas las medidas necesarias para restaurar el orden social". Los accesos a los edificios del gobierno y las carreteras tendrán que estar libres antes del lunes, para que los funcionarios puedan trabajar y los niños ir al colegio, añadió.

Los líderes de las protestas se retiraron de las negociaciones con autoridades gubernamentales luego de que las manifestaciones pacíficas se tornaron violentas el viernes. Los opositores a las movilizaciones ciudadanas acudieron a una segunda área de demostraciones en el distrito de Mong Kok, y destruyeron casas de campaña y forcejearon con los manifestantes; docenas resultaron heridos.

Joshua Wong, el desgarbado muchacho de 17 años que quiere llevar a Hong Kong por el camino de la revolución social. "El pueblo no debe temer a su gobierno", dice, citando la película "V de Vendetta", "el gobierno debe temer a su pueblo". Cuando toma el micrófono, de pie sobre una tarima, frente a cientos de manifestantes, su voz se enciende para arengarlos.

El líder defendió su postura al señalar que el movimiento prodemocrático que se ha extendido en esta última semana ha causado una seria repercusión en la vida de la gente, en los servicios públicos y los ingresos.

El Gobierno local recuerda que ayer los manifestantes bloquearon los accesos a oficinas gubernamentales y que por ello los empleados no pudieron acudir al trabajo. (euronews / CNN / BBC)