jueves, 30 de octubre de 2014

octubre 30, 2014
Envío especial para Libertad de Expresión Yucatán

Nosotros, Sí SOMOS UADY!!!

Yo fui estudiante de la UADY, me forme en la UADY y ahora trabajo en la UADY, cuando entré a trabajar a mi “Alma Mater” fue para mí algo que me llenó realmente de orgullo y de emoción, porque podría transmitirle a las nuevas generaciones, lo que mis profesores me transmitieron, no solo el conocimiento si no el cariño de pertenecer a la UADY!! De ponerse la camiseta!!


Sin embargo a lo largo de este tiempo he visto una UADY que se estado alejando de ser ese modelo de Universidad donde opinábamos y nos expresábamos, y se ha ido convirtiendo en lo que actualmente se ha llamado “La dictadura perfecta”, es curioso ver que el primer veterinario que entró a la Rectoría por votación, también entró por votación a la Dirección de la Facultad de Veterinaria, en contra de lo que en su momento querían las autoridades (pero recordemos antes si teníamos voz e incluso voto), y fue ese mismo Rector quien decidió que los profesores ya no debían de tener opinión sobre quien debía estar al frente de cada facultad, porque en sus palabras, solo él sabía que era lo que necesitaba la UADY (todos los demás somos unos retrasados o “ignorantes” sin capacidad de poder pensar y saber que necesita la institución, aunque él fue en su momento profesor y se rebeló contra el sistema con el apoyo de los “profesores incapaces de pensar y saber que necesita la UADY”). 

Esa misma línea se ha ido manejando a lo largo de su descendencia académica (Dájer/Williams?), insultando la inteligencia de los profesores de la UADY, una tras otra en sus mensajes, frases, excusas, pretextos. Cuando salen y dan explicaciones de porque no pueden haber cambios en la UADY, o porque “No hay dinero”, o de porque no podemos elegir a nuestros directores, o de porque no nos pagaron completa la beca, etcétera.

Los administradores actuales, estuvieron en nuestra posición antes, y saben que no somos tontos, y que podemos pensar y que sabemos que lo que dicen no tiene bases ni fundamentos, pero aun así lo hacen.

¿Por qué?: Porque les vale; Porque saben que No vamos a hacer NADA.

Porque no hemos sido capaces de levantar nuestra voz, porque estamos tan temerosos de que nos quiten nuestra comodidad y no queremos movernos de nuestra zona de confort, tenemos miedo a que tal si nos hacen algo, o si nos corren del trabajo, o si nos congelan, etcétera y salen los comentarios como “a mí no me gusta meterme en problemas”. Solo cuando nos tocan el bolsillo nos movemos y nos reunimos y queremos que nos defienda el sindicato, aunque durante el resto del año ni sabemos que existe porque su función parece limitarse a firmar cada año el incremento salarial o tramitar los permisos o préstamos a sus miembros. 

Hay una frase popular: Cada quien tiene el gobierno que se merece. 

¿Esto es lo que nos queremos para la UADY?

¿Merecemos quedarnos otra vez con lo que impone el Rector?

¿No podemos hacer NADA al respecto? 

Las facultades de Arquitectura y Veterinaria fueron los primeros en decir NO, no queremos la imposición, pero ¿y las demás facultades? ¿No tenemos gente Capaz de decir: No? ¿No Podemos? ¿Qué pasa en la UADY?

Creo que si no es en este momento, si no nos expresamos ahora, después será muy tarde, y ya no se vale quejarse, ya no se vale hablar en los pasillos de que no les parece lo que pasa.

Creo que hay en cada una de las facultades profesores que pueden promover las votaciones, no necesitamos que los consejeros convoquen, les pasamos nuestros resultados y que toda la comunidad sepa por quien queremos votar.

Puede ser que nuestro voto no llegue al consejo universitario, pero, que sepa toda la comunidad a quien queremos o a quien No queremos.

¿Por qué no sabemos si nuestro voto va a llegar al consejo universitario? Porque el voto es secreto. Por si el público lector no lo sabe, el consejo universitario se compone de:

I) El Rector, quién será el Presidente del Consejo (voz y voto)

II) Los directores de las Facultades y Escuelas; (17 directores de facultades con voz y voto)

III) Un representante de los Maestros de cada una de las Facultades y Escuelas (17 maestros) y 

IV Un representante de los alumnos de cada una de las Facultades y Escuelas (17 alumnos)

El consejo universitario se vuelve un círculo vicioso, porque el Rector los pone y luego ellos ponen al Rector. 

Cada Facultad tiene un Director impuesto por el Rector (con la venia y sumisión del Consejo Universitario, que hace el circo de votar para que quede el candidato que quiere el Rector). El director a su vez escoge entre los profesores al que quiere que sea el consejero maestro (siempre y cuando sea aprobado por el Rector, ¡claro esta!) y entre los profesores de su planta hace que voten por él. 

En el caso de los consejeros estudiantes estos si son votados por los estudiantes de las facultades, pero no les importa quienes sean, por que como jóvenes que son, saben que son altamente influenciables por los directores y en algunos casos comprados con promesas de puestos en la institución una vez que hayan egresado de la escuela, como el caso del Dr. Jorge Carlos Guillermo Herrera que en su momento fuese Consejero Alumno de la Facultad de Medicina y actualmente es el jefe del Departamento del sistema de atención integral al estudiante universitario.

Así que sí el ungido, delfín, heredero o como se le quiere llamar al MVZ José Williams llega a la rectoría, aun en contra de lo que queremos, que esa persona sepa que No lo queremos, que nos lo impusieron y le reclamaremos porque: 

¡NOSOTROS SOMOS UADY!