lunes, 6 de octubre de 2014

octubre 06, 2014
MÉRIDA, Yucatán, 6 de octubre.- El 2 de octubre de 1968, siendo Presidente de la República Gustavo Díaz Ordaz y Secretario de Gobernación Luis Echeverría Álvarez, se cometió un crimen de Estado contra el movimiento estudiantil que buscaba la democratización de las instituciones del país.


La matanza de la plaza de Tlatelolco es una herida profunda en la sociedad mexicana en su lucha por mejores condiciones de vida, que aún no cierra y, además, un golpe de estado contra la democracia y la educación pública, gratuita y de calidad. 

MORENA Yucatán repudia que la historia se repita y la herida siga supurando. El secuestro y cobarde asesinato de normalistas en Iguala, Guerrero, llevada a cabo por ambas manos de la delincuencia organizada, la ilegal y la institucional, es un  capítulo más de la historia de sangre que  tanto disfrutan escribir los operadores del proyecto neoliberal en nuestro país. Condenamos el desdén gubernamental por las legítimas demandas de educación para el pueblo, que se traspasan sin satisfactoria solución de una administración a otra; igualmente, condenamos el brutal salvajismo de acallar la protesta asesinando a la juventud que se ocupa no solo por su futuro, sino por el futuro de nuestro país. Condenamos el burocratismo del que echa mano el sistema tripartidista para dejar impune el crimen y exigimos el restablecimiento de la justicia en nuestro país, pues la cadena de crímenes de la oligarquía es ya demasiado larga y amplia. 

La sangre y las atrocidades de 1968 son las mismas de hoy. Se impone un modelo empresarial que empobrece a la ciudadanía, se persigue y encarcela a quienes se inconforman y organizan, y se asesina impunemente, mientras el dolor y el padecimiento se perpetúa en la memoria nacional. Es por ello que MORENA asumió la tarea de informar, concientizar y organizar a la ciudadanía en torno a un proyecto totalmente distinto, basado en la participación social y la práctica cotidiana de nuestros derechos, donde esté garantizada la vida digna.  Invitamos a los ciudadanos yucatecos a  no olvidar los crímenes de quienes se enriquecen a su costa y recordemos a quienes lucharon en el pasado; trabajemos juntos por terminar con este periodo triste y cruel de nuestra historia.

Finalmente, nos solidarizamos con las expresiones en este sentido, que seguramente se llevarán a cabo en nuestro estado.

¡Ni perdón sin justicia, ni olvido sin esperanza! ¡Sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación! (Boletín)