domingo, 21 de septiembre de 2014

septiembre 21, 2014
TIRANA, Albania, 21 de septiembre.- El papa Francisco llegó a Tirana en una breve visita de un día a Albania, país que es modelo de convivencia pacífica entre las religiones y en el que rendirá homenaje a los mártires durante la época del régimen comunista.

Jorge Bergoglio llegó a bordo de un avión regular de la compañía italiana Alitalia y fue recibido en el aeropuerto Madre Teresa de Tirana por el primer ministro albanés, Edi Rama, así como por otros miembros del gobierno y autoridades religiosas.

En el mismo aeropuerto, el Papa mantuvo un breve encuentro con el primer ministro albanés, que le regaló una copa de vidrio rellena de tierra albanesa.

"Nadie piense que pueda escudarse en Dios mientras diseñe y perpetre actos de violencia y abuso. Que nadie tome la religión como pretexto para sus acciones contrarias a la dignidad humana y los derechos humanos fundamentales, principalmente el derecho a la vida ya a la libertad religiosa para todos": Papa Francesco, en Tirana. (Repubblica)

A continuación, la comitiva se dirigió a la capital, donde el Papa será recibido en el palacio presidencial por el jefe de Estado, Bujar Nishani.

A las once hora local (09.00 GMT) está prevista la celebración de una misa en la Plaza Madre Teresa, donde desde primera hora de la mañana le esperan miles de albaneses llegados también desde Kosovo, Macedonia, Montenegro y otros países europeos.

Más de 2 mil 500 agentes de policía velarán durante las escasas once horas que durará la visita por la seguridad y, según un comunicado de la Dirección General de la Policía de Albania, 50 francotiradores estarán apostados en puntos estratégicos de la ciudad.

Además, se han instalado 27 puntos de paso en el Bulevar de los Mártires, que desemboca en la Plaza de la Madre Teresa, desde donde los fieles podrán seguir la misa en directo y a través de grandes pantallas.

Según las autoridades, se han reforzado además las medidas de control en la frontera con Kosovo y Macedonia, y en las carreteras que conducen a la capital, para evitar incidentes por parte de islamistas procedentes de los países vecinos.

 La visita del Papa a Albania, la primera que realiza un sumo pontífice desde Juan Pablo II (1993), ha despertado no solo un fuerte interés entre la minoría católica de este pequeño país balcánico de 2.8 millones de habitantes, sino entre muchos miembros de las otras comunidades religiosas.

Ese ha sido precisamente uno de los motivos principales por el que Francisco ha elegido Albania para su cuarto viaje internacional, y primero a un país europeo.

Según el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, el objetivo de esta visita es "promover el mensaje de armonía y fomentar el clima de convivencia entre las religiones, que puede ser un mensaje a otras partes del mundo".

En la inauguración de una exposición dedicada a la persecución de los católicos durante el comunismo, el primer ministro señaló que Albania es un país de "ciudadanos musulmanes y cristianos que encarna el espléndido ejemplo de la convivencia religiosa".

"Esto hace que Albania sea muy importante para el Papa, que inicia su viaje por Europa no en el Bruselas rico sino en la Tirana pobre, no en la Europa unida sino en la Europa que ha quedado fuera de la fotografía de la familia europea", dijo Rama.

El Papa se reunirá con los líderes de otras religiones y celebrará la oración de las vísperas con sacerdotes, religiosos, seminaristas y movimientos laicales en la catedral de Tirana.

Antes de regresar a Roma, visitará a los niños del centro Betania y se encontrará con enfermos y otros asistidos por centros caritativos de Albania en la iglesia de esta sede. (EFE)