martes, 23 de septiembre de 2014

septiembre 23, 2014
FREETOWN, Sierra Leona, 23 de septiembre.- Sierra Leona celebró el domingo el fin de una cuarentena total de tres días destinada a frenar la peor epidemia de ébola en el mundo y las autoridades aseguraron que gracias al controvertido aislamiento se había logrado identificar docenas de nuevas infecciones y localizar numerosos cadáveres.
En una de las estrategias más extremas adoptadas por un país desde que comenzó la epidemia, Sierra Leona ordenó a sus 6 millones de residentes a permanecer en sus hogares, mientras voluntarios recorrieron las casas para educar a las familias, aislar a los enfermos y retirar los cadáveres.

Una cruz de gis para un hogar inspeccionado. Durante el toque de queda en Sierra Leona, aproximadamente 30,000 voluntarios han ido  de casa en casa para detectar infectados por ébola y muertos por el virus. (AP / dpa)

Calle desierta en Freetown durante el toque de queda, que duró tres días. Difícil medida en un país de jornaleros que viven al día y no pudieron comprar lo indispensable. (AP / dpa)

Ayudantes distribuyen jabón. En Sierra Leona muchas personas no creen que realmente exista el virus del ébola. La ayuda sanitaria se ve perjudicada por los rumores de que el jabón está infectado. (AP / dpa)

Tarde el domingo, incluso antes de que el aislamiento terminara oficialmente a medianoche, residentes de algunas partes de la capital Freetown salieron a las calles a cantar y bailar. La policía en el sector oeste de la ciudad dijo que tuvo que realizar arrestos en un intento por hacer cumplir la medida en sus últimas horas.


Más temprano, Stephen Gaojia, jefe del Centro de Operaciones de Emergencia que lidera la respuesta nacional contra el Ébola, aseguró que los equipos del Gobierno no habían logrado alcanzar algunas áreas.

"Aun cuando el ejercicio ha sido un enorme éxito hasta el momento, no ha sido concluido en algunas ciudades metropolitanas como Freetown y Kenema", dijo a Reuters.

Gaojia dijo 92 cuerpos habían sido recuperados en todo el país al finalizar el sábado, el segundo día del encierro.

Unas 123 personas habían contactado a las autoridades durante la campaña, creyendo que podrían estar infectadas. De ellas, 56 dieron resultado positivo al ébola, 31 dieron negativo y 36 aún están esperando sus resultados, declaró.

El Centro de Operaciones de Emergencia anunció la noche del domingo que no extendería la cuarentena con el fin de llegar a los hogares restantes, aunque más temprano había dicho que podría ampliarla.

"No puede extenderse porque se han cumplido los objetivos", dijo Gaojia.

El ébola ha infectado al menos a cinco mil 843 personas personas en África Occidental desde marzo, principalmente en Sierra Leona, Guinea y Liberia, matando a dos mil 803 de ellas, según la Organización Mundial de la Salud. Al menos 562 personas han muerto en Sierra Leona.

El brote de la fiebre hemorrágica es la peor desde que fue identificada en 1976 en los bosques de África central.

La cuarentena se decretó para permitir a 30,000 trabajadores de salud, voluntarios y maestros visitar los hogares del país.

Algunos criticaron la medida antes de que comenzara el viernes debido a que los intentos de abastecerse de provisiones provocaron un alza en los precios, dejando a muchos pobres de Sierra Leona sin comprar alimentos.

Médicos Sin Fronteras también advirtió que la medida podría llevar a las personas a ocultar los casos.

Sin embargo, los residentes cumplieron en gran medida con el plan y las calles de la capital se mantuvieron prácticamente desiertas, a excepción de las ambulancias y vehículos de la policía. (Reuters)