sábado, 9 de agosto de 2014

agosto 09, 2014
WASHINGTON D.C., 9 de octubre.- El presidente estadounidense Barack Obama prometió ayer continuar los ataques aéreos para ayudar a las poblaciones amenazadas por el avance de los “yihadistas” en Irak, llamando de nuevo a la formación de un gobierno de unión para hacer frente a los insurgentes sunitas.

El viernes, Estados Unidos lanzó sus primeros ataques en Irak, cerca de tres años después de su partida, para tratar de detener el avance de los insurgentes del Estado Islámico (EI) que amenazan al Kurdistán y a miles de civiles cristianos y yazidíes después de haberse apoderado de grandes territorios.

Protesta de yazidíes residentes en Alemania. (DPA)

Las fuerzas iraquíes y kurdas se preparaban ayer para recuperar el terreno perdido en el norte de Irak tras los bombardeos estadounidenses contra posiciones yihadistas, que Washington está dispuesto a continuar “si es necesario”.

Paquetes con agua y alimentos que la Fuerza Aérea de Estados Unidos deja caer en las montañas donde se refugian cristianos y yazidíes. (AP)

Tras un día de ataques aéreos estadounidenses contra los “yihadistas” del grupo EI, un alto oficial en el Kurdistán iraquí dijo que había llegado el momento de contraatacar.


“Tras los ataques de Estados Unidos, los peshmerga primero se reagruparán, luego se desplegarán en áreas de las que se habían retirado, y por último ayudarán a los desplazados a volver a sus hogares”, dijo Fuad Husein a los periodistas ayer en Erbil, la capital kurda.

Según la ONU, en Irak hay unos 200,000 cristianos y yazidíes en fuga y escondidos en las montañas. La imagen de Reuters es de la protesta de yazidíes en Alemania.

Los combatientes del EI se encuentran a apenas unos 40 km de Erbil, pero aún no han cruzado la frontera de la provincia autónoma.

Para el ministro iraquí de Relaciones Exteriores, el kurdo Hoshyar Zebari, el hecho de no haber ayudado militarmente a los peshmerga fue un error.

Un gobierno unificado

“No voy a dar un calendario preciso”, dijo Obama ayer en conferencia de prensa, poco después de los primeros bombardeos estadounidenses en el norte de Irak e insistió en que era imperativo establecer un gobierno creíble en Bagdad.


El mandatario se mostró confiado en que EEUU podrá impedir que los militantes del EI lleguen a las montañas y “masacren a la gente que se refugió allí”.

Obama insistió en que lo más importante en este momento es la formación de un gobierno de unidad en Irak, porque “en ausencia de un gobierno iraquí, es muy difícil lograr un esfuerzo unificado” contra los yihadistas.

Al subrayar que las profundas divisiones étnicas y religiosas en Irak afectan los esfuerzos para combatir al EI, Obama dijo que sería más fácil movilizar a los iraquíes y obtener apoyo internacional una vez que esté en marcha un gobierno inclusivo.

En acción drones y cazas

Cazabombarderos y aviones no tripulados estadounidenses (drones) efectuaron otros cuatro ataques anoche sobre extremistas islámicos en Irak, poniendo fuera de combate a vehículos blindados y un camión que disparaban sobre civiles, informaron fuentes castrenses del Pentágono.

El Comando Central estadounidense indicó que los ataques no fueron realizados al mismo tiempo. Tres de ellos se efectuaron antes del mediodía, tiempo del Este de Estados Unidos, y uno alrededor de las 3 de la tarde.

En los tres casos los aviones regresaron sin novedades a sus bases en portaaviones.

Agua y alimentos para los refugiados

Bagdad. Aviones de carga estadounidenses, iraquíes y británicos dejaron caer toneladas de alimentos, agua, tiendas y otros materiales para los refugiados ayer y anteayer.

El Ministerio de Defensa de Irak mostró un video en el que se aprecia a personas refugiadas en las montañas Sinjar que corren para recoger agua y comida lanzados desde aviones C130 del gobierno iraquí.

Al menos 56 niños han muerto de deshidratación en las montañas, dijo ayer el vocero de Unicef en Irak. Autoridades británicas calcularon que entre 50,000 y 150,000 personas podrían estar atrapadas en las montañas.

Ibrahim Mohamed, vocero de la administración local de la ciudad siria de Qamishli, informó que más de 20,000 yazidíes hambrientos huyen a través de un “paso seguro” en la frontera en medio del acoso de las fuerzas del Estado Islámico. (AP)