viernes, 15 de agosto de 2014

agosto 15, 2014
CIUDAD DE MEXICO, Distrito Federal, 15 de agosto.- Para algunos capitalinos el salario mínimo vigente en el Distrito Federal es insuficiente para satisfacer sus necesidades básicas y coinciden en que debería situarse entre 150 y 200 pesos diarios.

Consultados por El Universal -fuente de esta nota-, ciudadanos opinaron, incluso, que el salario aprobado en el 2014, de los 67.29 pesos al día, sirve para cubrir la alimentación a medias.

“El salario actual es poco, es muy bajo. Sólo alcanza para la comida, si quieres algo más no te alcanza, porque todo está muy caro. Mínimo serían 150 pesos porque son muchas las necesidades que tenemos”, dijo Israel López, obrero.


Pedro Rosas, quien se dedica a barrer las calles del Centro Histórico, aseguró que el aumento al salario mínimo debe ser cuando menos “lo doble, como 150 pesos, con eso nos alcanzaría para transporte y para comer algo”.

“Nosotros trabajamos en el campo. El aumento a 150 pesos nos alcanzaría para mediocomer, ni siquiera para vestirnos. En el caso de la comida, el jitomate, la papa, todo está caro. Con 150 nos aliviaríamos un poco”, opinó Luciano García, un campesino, que se encontraba en el Zócalo capitalino.


“¿Cuánto está un kilo de carne? Ya está más de 60, 70 pesos. Deben subir el sueldo, no nada más las cosas. Mínimo debe ser un aumento de 150 pesos diarios”, aseguró Elías Vázquez Carvajal, quien llegó de la Sierra Norte de Puebla para conseguir trabajo en la capital.

“Un kilo de bisteces nos lo dan en 110 pesos. El kilo de frijol cuesta 30 pesos, el huevo 25. O sea, para un día de trabajo no alcanza ni para eso. Haciendo cuentas, para una familia de cuatro personas, son 250 pesos al día, más o menos”, opinó Irma Chaparro.

Entre las personas que fueron consultadas destacaron obreros y trabajadores, así como personas de clase media-baja, quienes también consideraron que el salario mínimo debería ser suficiente no sólo para la alimentación, sino para el transporte y otros gastos, como los útiles escolares, ahora que están por iniciar las clases. (El Universal)