SAO PAULO, Brasil, 9 de julio.- En el fútbol ninguna rencilla es eterna. Todos los mexicanos conocemos a Arjen Robben y algunos aun lo incluyen en sus pensamientos diarios, para bien o para mal.
Sin embargo, esta tarde el mediocampista se sumó a las filas del consuelo conformadas por Neymar, Ronaldo, Ochoa, Suárez y un largo etcétera de jugadores que lo entregaron todo en las canchas brasileñas por la Copa del Mundo: fiel a su historia, Holanda fue eliminado por Argentina en penales.
Al concluir el encuentro, el clavadista Robben se acercó a su esposa e hijo para intentar consolarlos. La imagen del pequeño sumido en la tristeza ha dado la vuelta al mundo y conmovido a más de uno pues ahora Robben, como padre y figura, tendrá que explicar a su pequeño lo que ocurrió y darle una nueva esperanza.
Así los sentimientos por el futbol. (SDPNoticias)