jueves, 31 de julio de 2014

julio 31, 2014
ATENAS, Grecia, 31 de julio.- Aunque en los últimos tiempos ha preferido mantenerse completamente aislada de la opinión pública, la cantante Paulina Rubio ha roto su mutismo en las redes sociales para demostrar que no está dispuesta a que el conflicto que la enfrenta en los tribunales a su ex marido Nicolás Vallejo-Nágera Colate afecte al buen humor que suele destilar en vacaciones.

Haciendo gala de la extrovertida personalidad que un día fue su gran seña de identidad, la Chica Dorada ha compartido una serie de instantáneas que dan buena cuenta de su envidiable escapada a las islas griegas , donde se la puede ver disfrutando de las cristalinas aguas mediterráneas en compañía de una amiga. De paso, la intérprete ha demostrado con un minúsculo bikini azul que aún sigue conservando la espectacular silueta que en su momento le allanó el camino hacia el estrellato musical.

Pau lució bikini.
Con Jerry Bazúa.

"Disfrutando de las islas griegas y del sol", anunció la artista a todos sus seguidores por medio de sus perfiles de Instagram y Twitter.

Más allá de la necesidad que tenía de tomarse un merecido descanso antes de centrarse de nuevo en los preparativos de su disco, estas vacaciones habrán supuesto sin duda una oportunidad perfecta para que la mexicana pueda evadirse de la polémica tras ser acusada de agredir físicamente a su ex marido durante varios episodios de violencia doméstica en la última etapa de su tumultuoso matrimonio.

Queda por ver cuál será la respuesta de Paulina al duro varapalo judicial que sufrió hace unas semanas, después de que su ex empleada doméstica Ivette Ramírez -encargada de cuidar al pequeño Andrea Nicolás  en sus primeros meses de vida- asegurara en un tribunal de Miami que las discusiones entre la artista y Colate terminaban con frecuencia en ataques físicos lanzados por la temperamental intérprete.

La Chica Dorada, su pareja -d-, su hermano y una amiga.
Asimismo, pese a que muy pocos apostaban al principio por un romance que comenzó ante las cámaras de la edición mexicana de La Voz, la cantante Paulina Rubio y su ex alumno Gerardo Bazúa han demostrado con el paso de los meses que lo suyo no es un mero idilio fugaz y pasajero, sino una relación madura destinada a perpetuarse en el tiempo.

De hecho, la Chica Dorada no ha querido separarse de Gerardo durante el período estival y por eso le ha invitado a acompañarla durante su recorrido en yate por aguas mediterráneas, una escapada que ha permitido al intérprete integrarse aún más en el círculo de allegados de Paulina, demostrando que los casi trece años de diferencia que existen entre ambos no suponen ningún obstáculo para su amor.

"Con mi familia navegando por el Mediterráneo. El amor está en el aire", aseguró la artista mexicana en su perfil de Instagram, una descripción de la tierna imagen con la que deja patente la buena química que existe entre todos.

Parece que tanto la artista como su pareja han decidido poner tierra de por medio para olvidarse por unos días de las respectivas polémicas que les han salpicado de lleno durante los últimos meses: las eternas disputas judiciales con su ex marido Nicolás Vallejo-Nágera en el caso de Paulina, y la tensión que define en la actualidad la relación de Gerardo con la madre de sus hijos, Yuriko Sandoval.

Jerry Bazúa.

Aunque el cantante se divorció de su ex mujer a principios de este año, Gerardo podría no haber conseguido olvidar del todo su vida en común pese al ilusionante noviazgo que mantiene con Paulina. Como informaba el portal TVyNovelas, el cantante y Yuriko mantuvieron una fuerte discusión hace unos días en relación al nuevo novio de ésta, quien ya habría conocido a los hijos de la ex pareja para desgracia del temperamental Gerardo.

El corazón de Paulina Rubio vuelve a estar ocupado, como el de Colate con Alegría. Paulina ha hecho de jurado en La Voz azteca y se ha encontrado, en su propio equipo, con una agradable sorpresa vital: Gerardo Bazúa, de 28 años, 13 menos que ella.

Parece que entre los dos cantantes ha surgido la chispa y juntos se les ha podido ver paseando por Miami en un descapotable y en un yate, dedicándose todo tipo de carantoñas. Gerardo hasta ha conocido al pequeño Andrea Nicolás. (Agencias)